Este lunes entró en vigencia en los municipios del estado Lara la nueva tarifa para el transporte colectivo aprobada por Fedetransporte la pasada semana en un Consejo Consultivo celebrado en Caracas.
Como informó El Impulso, el nuevo costo del pasaje urbano es de 700 bolívares entre lunes y viernes, hasta las 6 de la tarde, mientras que sábado y domingo tendrá un recargo de otros 100.
El alza tomó por sorpresa a muchos usuarios del servicio y, de acuerdo a varios consultados, “lo aceptamos con resignación porque no nos queda más”.
Giovanny Peroza, secretario general del Sindicato Automotor, dijo que ellos sólo están cumpliendo con una decisión federativa que tomó basándose en uno de los artículos de la última Gaceta Municipal en el que se establece que, cada vez que el Presidente de la República decrete un aumento de sueldos y salarios, ellos deben hacer una revisión y actualizar las tarifas.
Además, reiteró que ese aumento no alcanza para cubrir los gastos de mantenimiento de las unidades pues cada día se producen incrementos en los precios de los repuestos que se requieren para que el transporte colectivo no se paralice.
“Ahora, además de los precios de cauchos, baterías y otros, tenemos el caso del aceite para motor, que está aumentando escandalosamente con frecuencia y ahora un cambio de aceite para una buseta que funcione con gasolina sale en un millón de bolívares de los viejos y tres si es de gasoil”, enfatizó.
Este lunes, el transporte colectivo urbano operaba con normalidad, aunque con menor cantidad de pasajeros que movilizar debido a que la banca no estuvo disponible para sus servicios normales.
Llamaba la atención que las unidades de la mayoría de las rutas no portaban en el parabrisas avisos de que a partir de ayer el pasaje pasaba de 500 a 700 bolívares. Sólo las busetas de la Ruta 5 las portaban.
“Me estoy enterando que ahora cuesta 700. Nos sale caro porque suben los gastos”, manifestó Ángel Echeverría.
Considera conveniente que el gobierno Nacional ofrezca a los transportistas repuestos a bajos precios para que ellos no tengan que aumentar las tarifas.
“Malo para el bolsillo, incluso para nosotros los estudiantes, que ahora pagaremos 350 en vez de los 25 que pagábamos, pero, ¿qué más da?, dijeron por su parte María y Juana, dos jóvenes que se disponían a subir a una unidad en la carrera 19.
Un chofer, por su parte, dijo que algunos pasajeros protestan pero luego aceptan resignados.
