Aragua lo hace todo bien y por eso anda al galope. Aprovechó el débil relevo de Lara, estuvo fenomenal al campo y bateó oportunamente. Freddy García parece aumentar a los 41 años su maña y habilidad de siempre. Tres de los seis hits que toleró en seis tramos se los ligaron en el segundo inning de dos carreras.
Antes y después mareó a los pájaros rojos con un recital de envíos nunca más allá de las 85 millas, mostrando señales del tirador de alto rango que hemos conocido. Buddy Bailey movió su bullpen, el mejor de la liga, y cuatro brazos sacaron los últimos nueve outs, ayudados por la defensa en el cuadro interior.
A Cardenales, en cambio, le faltó fuelle en el trabajo intermedio de sus lanzadores. Williams Pérez fue la buena noticia al reaparecer con cuatro episodios promisores y dos incogibles aceptados.
Llegó Osmer Morales y no puso out a ninguno de los cuatro que encaró, barriéndole las bases el debutante Carlos Talavera con un triple. Fabián Blanco, Daniel Álvarez y Chase Huchingson hicieron el trabajo y se perdía por una, pero los Tigres atacaron a José Rodríguez en el octavo y le bajaron la guardia a los locales.
Un par de errores de Taylor y Escobar terminaron de arruinar la posibilidad de remontar. Quedó en cuatro la cadena victoriosa, pero hay buenas sensaciones con un pitcheo abridor que va en alza. Hoy lanzará en su tierra Néstor Molina frente al Magallanes para seguir persiguiendo el esquivo balance de 500 puntos.
