Hace un año que el Fondo Nacional de Transporte Urbano (Fontur) tomó la decisión de eliminar la tarjeta estudiantil, mecanismo con el que se mantuvo la paz entre el sector automotor y los universitarios durante más de una década.
Desde que se ejecutó tal acción, se retomó la pugna entre las partes, especialmente por el hecho de que se les prometió a ambos que para inicios del presente año se contaría con un nuevo sistema que daría solución a la problemática creada.
La espera ha sido larga, por lo que representantes universitarios se dirigieron a la oficina de Fontur para exigir una respuesta. Con pancartas en mano los jóvenes exigieron ser atendidos por alguna autoridad que les aclare la situación.
Jesús Suárez, presidente del centro de estudiantes del decanato de ciencias económicas y empresariales (DCEE), destacó que hasta ayer no se les había dado ninguna información, por lo que la incertidumbre se ha mantenido durante todos estos meses.
La presencia de los universitarios, quienes cerraron el canal de servicio de la avenida Libertador, provocó la presencia de funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), quienes solicitaron que se despejara la vía, puesto que se trataba de “un área conflictiva” y podía generar la presencia de grupos violentos.
A través de un documento, expusieron lo complicado que resulta para el estudiante trasladarse a su casa de estudio, puesto que deben cancelar el pasaje completo ya que los transportistas aseguran que no se les cancela el subsidio que les prometieron al momento de eliminar la tarjeta estudiantil.
“Primero nos dijeron que el nuevo sistema se instauraría en marzo, luego para junio, ya estamos en noviembre y seguimos esperando”, dijo el dirigente quien aseguró que tienen la disposición de colaborar para encontrar una solución.
Suárez indicó que pueden permitir que se les quite tal derecho, debido a que esto ha generado una gran deserción en las casas de estudio, superior al 30% de la masa estudiantil.
Los jóvenes lograron un encuentro con el coordinador de Fontur, Elvis Rojas, quien aceptó que se tiene una deuda con los transportistas, pero se encuentran cancelando los meses de agosto y septiembre, este último con un aumento de 120 bolívares por pasaje.
A partir de la próxima semana se realizarán mesas de trabajo con los representantes del sector transporte, Fontur y la alcaldía con el fin de generar un acuerdo con respecto al nuevo sistema. “Se nos dijo que el estudiante puede subir a la unidad mostrando su carnet de la universidad y puede estar tranquilo porque se les está cancelando un subsidio”.
El mecanismo que se había conversado se trataría de una tarjeta como la que se utiliza con Transbarca y si bien Lara sería uno de los estados pilotos para la implementación del mismo, aún no se ha llevado a cabo.
Hasta los momentos el estudiante ha tenido que verse en la obligación de cancelar un aproximado de 2.000 bolívares diarios en rutas urbanas, mientras que quienes viven en municipios foráneos pueden gastar hasta 15.000 bolívares cada día, cifra que golpea arduamente el bolsillo de los universitarios.
