Quienes mañana jueves acudan a los cementerios del municipio Iribarren a rendir tributo a sus familiares difuntos no encontrarán mucha diferencia con respecto a meses anteriores pues las áreas alejadas de las entradas continúan completamente enmontadas.
Cementerio Municipal, conocido también como Nuevo, en la avenida Florencio Jiménez, la maleza sigue dominando todos los espacios, sobre todo los más apartados, cubriendo incluso numerosas tumbas, lo que imposibilitará el acceso de las familias con flores y velas para orar por los seres desaparecidos de entre los vivos.
“Aquí la limpieza sólo la aplicaron en la entrada, pero el resto sigue igual, como si a las nuevas autoridades municipales no les hubiese dado tiempo para acondicionar todo el camposanto”, manifestó Remigio Silva, párroco de la capilla del camposanto.
Pero considera que este jueves, como todos años, a pesar de como se encuentra la instalación, serán miles las personas que, con velas, flores y oraciones, recordarán a sus difuntos visitando sus tumbas, por aquello de, “Cosa santa y buena es orar por los vivos y por los difuntos”.
Anuncia para ese día, a las 9 y media de la mañana y 2 de las tarde, misas por el eterno descanso de quienes allí están sepultados.
En el Bella Vista
En el más antiguo de Barquisimeto, el de Bella Vista, o de la 42, como es más conocido, la situación no es diferentes a la el anterior, e incluso, es peor.
Salvo los espacios ubicados a pocos metros de la entrada, todo está convertido en un inmenso bosque que en la mayoría de los casos oculta tumbas o panteones, incluso los de mayor altura.
Este martes, aproximadamente cien obreros de la alcaldía de Iribarren hicieron una especie de toma o “barrido” de la entrada, dejando sin tocar la selva de las áreas del noreste o noroeste, hasta donde no podrán llegar mañana las familias ante el temor de ser afectados por una culebra o cualquier otro animal rastrero.
Allí existen verdaderas obras artísticas, algunas importadas de otros países, Italia entre ellos, que merecen protección de las autoridades para evitar el saqueo o destrucción por parte de antisociales, además de representar atractivos turísticos.