“Las constantes violaciones a la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y la negación de justicia a nuestro pueblo por parte del sistema judicial venezolano, ha sido algo tan obvio para los países democráticos del mundo, que como parte de los apoyos políticos a nuestra causa distintas instancias multinacionales, así como varios países de manera individual se han pronunciado de manera categórica a favor de que Venezuela retorne a su cauce democrático”.
Así comienza un manifiesto dado a conocer en Barquisimeto por un conjunto de ciudadanos que integran el Frente para la Defensa de la Constitución y la Democracia, a saber: Jorge Rosell Senhenn, Marco Tulio Mendoza, Jorge Euclides Ramírez, Luis Rodríguez López, Milagros Gómez de Blavia, Joel Rodríguez Ramos, Nancy Rodríguez de Rodríguez, Oswaldo González y Carmen Luisa Durán.
A propósito de los magistrados del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) nombrados por la Asamblea Nacional, el papel señala:
“La historia nos recuerda gobiernos en el exilio, pero éstos se limitaban al órgano Ejecutivo, mientras tanto es inédita la situación que se presenta con un órgano judicial en esa condición. No faltan razones formalistas para objetar la creación, reconocimiento y funcionamiento de este órgano fuera de las fronteras venezolanas; sin embargo el Derecho en consecución de sus altos fines debe reconocer a aquellas figuras que surgen de las necesidades que la realidad nos demuestra”.
Recuerdan una tesis universalmente aceptada: “El hecho de que una situación concreta no esté específicamente prevista en la ley no significa que no exista. Por otra parte el artículo 333 de la Constitución nos obliga a colaborar en el restablecimiento de su efectiva vigencia en caso de que sus disposiciones sean transgredidas”.
Advierten que las violaciones a la Constitución por parte de oficialismo a través de la anterior composición de la Asamblea Nacional fueron “múltiples y graves”, pues “se designó de manera irregular a magistrados de ese órgano sin obedecer a las normas respectivas; y luego al elegir legalmente a magistrados a través del órgano competente para ello, como lo es la actual Asamblea Nacional, el Ejecutivo desató una feroz persecución en contra de estos juristas, llegando a detener a uno de ellos y exiliándose el resto”.
Todo ello, indican, “justifica legalmente, con base en el artículo 333 de la Constitución, la instalación, el reconocimiento y el funcionamiento de este órgano en el exterior. La efectividad de sus resoluciones tendrá efecto si los Estados en donde este Tribunal funcione y el Estado al cual se dirija sus decisiones, lo reconozcan”.
Y añaden: “No nos queda la más mínima duda de que el papel protagónico que se le está dando al Tribunal Supremo en el exilio desde la OEA representa un espaldarazo político al pueblo venezolano, el cual ha sufrido de manera dramática y constante el peso de medidas arbitrarias emanadas de nuestro sistema judicial, contra quienes en nombre de la libertad y la Constitución han manifestado públicamente su descontento y rechazo ante una gestión autárquica que desconoce y persigue la diversidad de pensamiento y ha impuesto un régimen de corte totalitario que ha destrozado nuestra economía y degradado la condición social de todo un país”.
Luego: “Entendemos también que este apoyo internacional a nuestros magistrados en exilio es una acusación directa a la forma de impartir justicia en Venezuela. Este respaldo sumado a otros anteriores evidencia que nuestra lucha democrática cada día se posiciona como una causa humanitaria de primer orden, y eso lo hemos logrado con la unidad del pueblo en todos los eventos donde hemos participado”.
Con la lucha de calle durante cuatro meses, indica el Frente, se logró desenmascarar a nivel mundial al oficialismo en sus pretensiones de instalar una Constituyente ilegal que supliera a la Asamblea Nacional. “Hoy en todo el planeta la Asamblea Nacional goza de respaldo mientras que la Constituyente no es reconocida por nadie del mundo civilizado. Ese es nuestro triunfo y lo logramos con el pueblo unido”.
La prueba del 15-O
Por último asienta el documento: “Reiteramos que somos amantes de la paz, de la convivencia democrática y del Derecho como solución de los problemas sociales. Esos propósitos lo lograremos unidos este 15 de octubre al salir masivamente a votar por el candidato de la Unidad Democrática. Tenemos que ratificar ante el mundo que el apoyo político internacional que nos están dando vale la pena, que sus esfuerzos para ayudarnos a rescatar la Democracia gozan de nuestra solidaridad y beneplácito.
Cada día la comunidad internacional amplía sus apoyos, este últimos que toca el tema de la justicia es capital. Vamos todos a votar para que estos magistrados que despacharán desde la OEA, puedan hacerlo desde Caracas, y en Venezuela tengamos un sistema de justicia decente como nos lo merecemos”.