Jorwin Antonio Rodríguez Pérez, de 34 años de edad, tenía apenas dos días de vacaciones, las estaba disfrutando y este viernes se fue a tomar unos traguitos con una amiga. Cuando iba de regreso a su casa, fue interceptado por unos delincuentes quienes lo mataron tras darle varios golpes con un tubo en la cabeza.
El hecho se registró a la 1 de la madrugada en la calle 42 entre carreras 21 y 22, específicamente en las adyacencias del Terminal de Pasajeros.
Rodríguez Pérez, era trabajador de la empresa Viseteca, transporte de valores desde hace 6 años, estaba residenciado en el sector 1 de La Apostoleña, zona oeste de la ciudad y hace dos días había salido de vacaciones, vivía con su madre y un hermano, de quien se despidió a las 6 de la tarde indicando que saldría con una amiga.
A eso de la 1 de la madrugada de este sábado sonó el teléfono de la casa, avisaban que a Rodríguez Pérez lo habían herido, su madre y hermano preocupados se trasladaron hasta el lugar y se toparon con la peor escena. Su cuerpo yacía en el suelo, su rostro estaba muy golpeado y ensangrentado, le habían dado en varias ocasiones con un tubo.
Se conoció que fue entre dos a tres hombres que lo interceptaron para robarlo, primero le dieron contra un poste y posteriormente lo metieron hacia la zona de la entrada del cementerio de la 42 lugar donde se la pasan los guajiros y allí lo golpearon hasta matarlo, le quitaron su teléfono celular.
Rodríguez Pérez frecuentaba esa zona y siempre se iba a esa hora a su casa, por lo que creen que había salido para la avenida a buscar un vehículo, era el tercero de seis hermanos y con su muerte queda huérfano de padre un hijo de 14 años de edad.
Su hermano y hermana quienes prefirieron no dar su nombre, esperan que las autoridades hagan justicia.