El presidente del Centro de Estudiantes del decanato de Ciencias de la Salud de la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (Ucla), Freddy Torrealba, denunció que los más de 30 pasantes de dicha casa de estudios que hacen vida en el Hospital del Seguro Social Pastor Oropeza sufren ofensas de manera diaria, principalmente por no compartir la ideología oficial que se profesa en dicho nosocomio.
El pronunciamiento fue realizado en relación a lo ocurrido con Miriam Valiño y María Brizuela, cursantes del sexto año de Medicina y pasantes en el servicio de Ginecobstetricia del Pastor Oropeza, quienes fueron retenidas para ser interrogadas, por el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional, este lunes, a raíz de la divulgación de imágenes de parturientas dando a luz en condiciones infrahumanas en el mencionado centro de salud.
“No es cosa únicamente del lunes, no es la primera vez que sucede. El mismo personal del Seguro maltrata y excluye a los bachilleres por no compartir el mismo pensamiento ideológico que promueven las autoridades de allá. Es parte del juego político al que quieren involucrarnos”, manifestó Torrealba a EL IMPULSO.
Llamados de atención subidos de tono, discriminación para la atención de pacientes e interferencia en los procesos de aprendizaje, forman parte de los abusos que perpetraría personal médico y obrero en contra de los estudiantes.
El vocero recalcó que aunque los jóvenes se encuentren prestando servicios en distintas instituciones hospitalarias, el ente al que ellos responden sigue siendo su alma máter.
“En ningún momento pasamos a estar bajo supervisión de los adjuntos o residentes que formen parte del hospital. Hay docentes Ucla en cada servicio y cada inconveniente debe ser notificado a ese profesor. Nuestro órgano rector siempre va a ser la Ucla”, sostuvo.
Rechazó lo ocurrido con Valiño y Brizuela, al mismo tiempo que catalogó los interrogatorios a estas estudiantes como arbitrarios, puesto que los funcionarios del Sebin se llevaron a las futuras doctoras sin informar a persona alguna.
“Nos enteramos de lo ocurrido fue por voces de testigos y allí empezamos a movernos a ver quiénes habían sido. Ellos no pudieron habérselas llevado sin notificar al docente encargado de ellas”, dijo.
Confirmó que los siete estudiantes Ucla que rotaban en el servicio de Ginecobstetricia del Pastor Oropeza serán reubicados en un área del Hospital Central Antonio María Pineda. Les faltaba un día para culminar el semestre.
“Se va a hacer un análisis en cuanto a la seguridad de los estudiantes –Enfermería y Medicina- que quedan en el Seguro para después estudiar la posibilidad de incluirlos en las áreas del Hospital Central. Esto será a mediano plazo, posiblemente ya para el próximo semestre”.
Asimismo, puntualizó que con la medida de reubicación no se ven afectados los objetivos estudiantiles.
“El detalle está en que una universidad lo que debe buscar siempre es ganar espacios, no perderlos. Pero si los espacios están dominados por personas que excluyen a quienes piensan distinto que ellos, es complicado el desarrollo de las actividades allí”, sentenció.