Consciente de su misión de contribuir con el progreso del país a través de la formación de profesionales y de la generación de conocimientos, la UCLA retomó sus actividades académicas y administrativas, con el firme propósito de buscar las estrategias que le permitan sobreponerse a las limitaciones presupuestarias y a la crisis que afecta al país.
En sus aulas se espera recibir a un nuevo contingente de 3.920 jóvenes asignados por la Oficina de Planificación del Sector Universitario a las 21 carreras que se imparten en esta casa de estudios, quienes iniciaron la primera fase del proceso de inscripción el pasado 22 de septiembre el cual se extenderá hasta el 15 de octubre del presente año.
La profesora Maritza Delgado, directora de Control de Estudios de la UCLA, informó que hasta el 26 de septiembre se contabilizaron 1.500 estudiantes registrados, lo que denota un elevado interés de la población estudiantil por formarse en esta casa de estudios.
Expresó que con los estudiantes que se reciban por ingreso especial (mérito académico, cultural y deportivo) se espera que la matrícula ascienda a 4.364 estudiantes; además, anunció que en el mes de diciembre del presente año se dará apertura al censo, mecanismo mediante el cual se otorgan los cupos que resten luego del proceso de inscripción, proceso que pasa por el control de la OPSU.
Por otra parte, la profesora Delgado dijo que la UCLA reactivará el Proyecto de Ingreso Rural, mediante el cual se ofrecen cinco cupos a estudiantes de instituciones educativas de las zonas rurales de los municipios de Lara, que tengan un alto promedio y que no hayan sido asignados por la OPSU.
Decanatos activos
En los decanatos de la UCLA se reiniciaron las actividades académicas y administrativas, aun con las limitaciones en los servicios de comedor y transporte, por cuanto prevalece el interés de los estudiantes de continuar con su formación y de los profesores a cumplir con su misión con ética, aunque no disponen de la infraestructura y de los medios que requieren para sus labores de docencia, investigación y extensión.
Esta es la realidad que se aprecia en el Decanato de Ciencias de la Salud, a la que se refirió el profesor Nelson Loureiro, director administrativo, quien señaló que los estudiantes de los programas de Medicina y de Enfemería, que conforman una matrícula aproximada de 3.500, mostraron su disposición en volver a las aulas desde el pasado 18 de septiembre.
Hizo énfasis en la constancia de los estudiantes quienes acuden a sus clases por sus propios medios ante la falta de transporte y las limitaciones en el comedor, en el que no reciben el componente protéico necesario para su alimentación.
En el Núcleo Tarabana los decanos de Agronomia y de Ciencias Veterinarias realizan un trabajo mancomunado, con la finalidad de garantizar la continuidad de las actividades académicas, especialmente en lo relacionado con el uso del transporte estudiantil.
El decano de Agronomia, profesor Nerio Naranjo manifestó que las actividades fueron plenamente reestablecidas tanto en este Decanato como en el Núcleo Argimiro Bracamonte, de El Tocuyo, gracias al compromiso con la educación y con el país asumido por su personal, el cual cumple con mística con sus responsabilidades a pesar de la precariedad de las condiciones en las que deben laborar, las cuales no tienen predecente en la historia del Decanato.
Explicó que ante la realidad social y económica que afecta a los estudiantes, se tiene planteado flexibilizar los sistemas de enseñanzas, sin afectar la calidad de la educación, con la finalidad de permitir la prosecución a los estudiantes que se han visto obligados a trabajar para hacer frente a su situación socio-económica.
En el Decanato de Ciencias Veterinarias, luego de una semana de repaso general y de reprogramación, se dio continuidad a las clases, tanto en Tarabana como en el Núcleo Juan Agustín de la Torre.
El profesor William Zambrano, decano de Ciencias Veterinarias, informó que cuentan con el apoyo de la Dirección de Transporte y del Decanato de Agronomía para el traslado de estudiantes y trabajadores.
En el Decanato de Ciencias Económicas y Empresariales se reintegraron a sus actividades al menos 4.000 estudiantes a las carreras de administración, contaduría y economía. El decano, profesor Fernando Sosa, dio a conocer que cuentan con el apoyo de Tranbasca para el traslado de los estudiantes del horario nocturno.
Sosa aseguró que plantearán ante el Consejo Universitario la aprobación de una resolución de emergencia para apoyar a los estudiantes que les falta una materia por cursar pero que ya han cumplido con todos los requisitos para graduarse, por considerar que fueron afectados por la paralización de las universidades durante las protestas que afectaron el normal desenvolvimiento de las actividades.
En el Núcleo Obelisco los estudiantes de Ingeniería Civil, aproximadamente 2.000; y de Urbanismo, que conforman una una matrícula de 100, comenzaron sus clases el 18 de septiembre.
