La competitividad de un país depende de condiciones básicas como la existencia y el respeto a la Certeza Jurídica, al Estado de Derecho, a la Propiedad Privada y a la Libertad de Empresa, aseguran los industriales de América Latina al hacer un llamado a las autoridades de gobierno y a los distintos actores de los sectores sociales, públicos y privados a respetar y promover el desarrollo de la región.
Durante la Asamblea Extraordinaria, realizada en México, los representantes industriales de 16 países solicitaron a los gobiernos a tomar medidas que fortalezcan la confianza en las inversiones y en la generación de empleo formal, propiciando el desarrollo económico y social. De igual forma extendieron el llamado a los distintos sectores de la población latinoamericana a fomentar e elevar el nivel de la educación, la innovación y la investigación, como detonantes para incrementar la competitividad de los países de la región.
Fundamentan el llamado:
Los industriales latinoamericanos enfatizaron su llamado a través de los siguientes puntos:
1.- Respaldan la institucionalidad como vehículo para mantener el Estado de Derecho y la Democracia en los países de la región, con el deseo que todos los actores de la sociedad se desarrollen libre y plenamente.
2.- Rechazan a los regímenes populistas, de ideologías obsoletas, utópicas y probadamente fracasadas, que juegan con la realidad de pobreza y la frustración de mucha gente, sin ofrecer una verdadera solución, que sólo puede lograrse a través de una democracia participativa.
3.- Defienden el derecho de propiedad y la libertad de empresa, los cuales posibilitan el crecimiento económico y el desarrollo de nuestras naciones.
4.- Apoyan la correcta aplicación del Convenio 169 de la OIT, el cual debe ser implementado por y bajo responsabilidad exclusiva del Estado sin perjuicio a las empresas que operan dentro del marco de la ley.
5.- Respaldan la explotación de recursos naturales, de forma sostenible, que contribuyan al crecimiento económico de la región y aporten al desarrollo social de sus ciudadanos.
6.- Se comprometen en la lucha contra la corrupción, cuya prevalencia en los países de América Latina socava la competitividad de los mismos al aumentar los costos y tiempos de las actividades empresariales y al empeorar el clima de negocios.
7.- Apoyan la Alianza Latinoamericana Anti Contrabando (ALAC), la cual nace de la necesidad de que exista un compromiso de colaboración tanto público como privado, por unir esfuerzos concretos en la lucha contra el comercio ilícito.