Comprar un teléfono hoy en día es todo un ejercicio de selección de alto nivel, y entre todas las características que nos ofrece el dispositivo, las prestaciones de la cámara son, sin duda, las que más atención se llevan.
Por Carolina Fresneda Lorente para Think Big. Hasta hace no mucho, comprarse un teléfono móvil estaba sujeto a motivos, a priori, justificados, como fallos en el funcionamiento, caídas, roturas, extravío o deterioro del propio dispositivo.
Hoy en día el motivo principal por el que se cambia de móvil es porque cada año sale un modelo nuevo, y esto implica que si quieres estar a la última tienes que adquirir el nuevo modelo, claro está, si tu situación económica te lo permite.
Ahora los teléfonos móviles son todo pantalla. Una superficie plana y táctil que gana terreno a los límites del dispositivo. Además, cuanto mayor sea la resolución, mucho mejor. Una ventana al exterior que cuidamos con mimo, protegiéndola con protectores, valga la redundancia, y que nos permite asomarnos a la realidad con una calidad incluso superior a la real.
Dime qué smartphone tienes y te diré cómo son tus fotos
Quien tiene un amigo tiene un tesoro y quien tiene un teléfono móvil de última generación tiene en sus manos una poderosa herramienta de creación artística audiovisual.
Desde fotos hasta videos, pasando por el retoque fotográfico cuasi profesional antes de tomar la foto, edición de video on line, retransmisiones streaming, grabaciones profesionales y creaciones artísticas variadas. Las cámaras de los teléfonos móviles son ya incluso mejores que muchas de las cámaras profesionales que hay en el mercado. Una cámara que roza la profesionalidad integrada en un espacio de aproximadamente de entre 5 y 6 pulgadas.
El uso de los smartphones está cada vez más orientado a servicios extra que nada tienen que ver con la razón principal para el que fueron creados los teléfonos móviles: hablar.
¿Vale la pena tener un móvil con doble cámara?
Lo cierto es que la decisión de compra entre dos terminales puede estar determinada en función de las características o prestaciones de la cámara de fotos.
En el mercado tecnológico es cada vez más frecuente, y la tendencia es esa, encontrar teléfonos móviles con cámara fotográfica dual, pero, ¿qué ventajas aporta la doble cámara en nuestro smartphone? Dicen que una imagen vale más que mil palabras, y lo cierto es que el refrán tiene razón, al menos cuando hablamos de tomar y comunicar con fotografías hechas con el móvil.
Si analizamos la evolución de las fotografías a través de la tecnología, pronto nos daremos cuenta de lo que supone el valor de la imagen. Gracias a los smartphones dotados con cámaras de alta gama, todos podemos ser, y de hecho ya lo somos, fotógrafos profesionales.
Fotografía profesional al alcance de cualquiera
No hay duda de que toda la industria está volcada en conseguir la mejor cámara que haga las mejores fotografías en manos de cualquiera. Una cámara profesional portable y del tamaño de un teléfono móvil con la que además puedes editar y compartir tus fotografías con el mundo exterior en el momento.
La doble cámara trasera de los teléfonos móviles ofrece fotografías nítidas y de gran calidad, incluso cuando han sido tomadas en movimiento o con poca luz. La hiperconectividad nos hace estar a cada momento con el teléfono en la mano, llueva, truene, haya luz o estemos a oscuras. Cualquier momento es bueno para ser fotografiado y compartido con los nuestros.
Los megapíxeles y la calidad de la fotografía
La tendencia este año 2017 está siendo la fabricación de terminales con menos megapíxeles pero con mayor tamaño de píxel. De forma errónea se piensa que el número de megapíxeles influye en la calidad de la fotografía, y esto no es así. Es uno de los factores, pero no es el único.
Las características que hay que tener en cuenta a la hora de valorar una cámara de fotos en el smartphone son:
-Megapíxeles. Se refiere al número de píxels que contiene la imagen y que permiten ampliar la calidad de la fotografía sin perder nitidez.
-Tamaño del píxel. Al disminuir el número de megapíxeles, el tamaño de los píxeles aumenta, lo que hace que se capture más luz y, por lo tanto, mejores fotografías.
-Tamaño del sensor. El sensor permite capturar más luz para obtener mejor calidad de imagen. En este caso hay que tener en cuenta que el tamaño del sensor debe estar en consonancia con el móvil, ya que influye directamente en el procesado de las imágenes. A mayor tamaño, más recursos de procesado y más consumo de batería.
-Apertura focal. Las grandes marcas llegan a acuerdos con fabricantes de lentes como Carl Zeiss o Leica para desarrollar las mejores cámaras. En este sentido, la apertura focal es un elemento fundamental. Una mayor apertura focal permite capturar fotografías con más luz y menos ruido y distorsión.
-Enfoque. El autofoco rápido es un un elemento indispensable para no perder detalle. Ayuda a mejorar la experiencia de usuario con la cámara.
-Procesamiento de la imagen. Una vez tomada la fotografía, el post procesado es un momento clave para obtener fotografías más creativas y atractivas.
-Estabilizador de imagen. A la hora de comprar un móvil, el estabilizador es una de las características clave. El estabilizador en la cámara compensa los movimientos cuando estamos andando o nos movemos. El estabilizador puedes ser óptico o electrónico.
-Aplicación de la cámara. La calidad de las fotografías también depende del software empleado. Es importante que la aplicación sea rápida, que proporcione una buena experiencia al usuario y, por supuesto, ofrezca servicios extra como distintos modos, filtros, HDR automático, etc.
Son muchos los fabricantes que ya tienen en el mercado diferentes modelos de teléfonos de gama media, media-alta con cámara fotográfica dual. Todos con un objetivo común: captar la mejor instantánea.
El smartphone es ya una extensión de nuestro cuerpo a través del cual miramos al exterior. Un dispositivo conectado las 24 horas del día y que nos permite estar en contacto con nuestro entorno. Aun así, y a pesar de ser una super herramienta también necesita de ciertos cuidados que no podemos pasar por alto.