La escasez de gasolina que se viene observando en estos momentos se debe al desarrollo del problema que se desató cuando el Gobierno despidió al personal que tenía mayor experiencia en la industria petrolera, dejó de invertir en el mantenimiento de las instalaciones y bajó la producción del crudo, además de otras fallas que ha tenido la política del Ejecutivo Nacional.
Este cuadro desalentador fue expuesto en entrevista concedida por el Dr. José Toro Hardy, ex directivo de Petróleos de Venezuela, a EL IMPULSO, telefónicamente.En sus declaraciones también se abordó el asunto de las sanciones impuestas por la administración de Donald Trump a las políticas venezolanas, que han atacado la yugular financiera del país.Se ha venido registrando falta de gasolina en algunas regiones del país y se ha informado que un barco que traía elementos para la refinación de ese combustible no pudo atracar porque no le habían pagado.
¿Es esa u otra la causa de la escasez?
-Es un problema que se viene desarrollando desde hace bastante tiempo. Empieza cuando despiden a 20 mil trabajadores, que representaban 300 mil años de experiencia por tener en promedio de quince años cada uno en la industria, con el agravante de que el 75 por ciento de esos despidos formaban parte de la nómina mayor. A partir de ese momento se han venido presentando dificultades importantes, aparte de la baja del precio del petróleo.
No se hicieron las inversiones de mantenimiento necesarias. Hoy en día se está trabajando al 50 por ciento de la capacidad instalada. Y lo que se está presentando son las partes más complejas del proceso: conversión profunda del crudo extrapesado, craqueo catalítico y otros procesos de refinación.
Esas operaciones permiten transformar crudos pesados en productos livianos de alto valor como son las gasolinas. Adicionalmente, se necesitan aditivos muchos de los cuales eran elaborados por nuestras propias refinerías; pero, la falta de mantenimiento y la baja calidad con que están operando hace que no se puedan fabricar esos aditivos y en consecuencia tienen que ser importados. Eso se complica, primero, por la situación difícil de PDVSA.
Las empresas que están despachando productos que necesita esta petrolera, incluso gasolina, no lo hacen si no les pagan por anticipado. Añádase el problema de las cartas de créditos. Si bien en las sanciones norteamericanas no quedó prohibida las ventas de gasolina, para que ingresen a nuestro país se requieren cartas de crédito, pero quienes pueden autorizarlas son individuos que están en la lista de sancionados y en consecuencia, no las pueden aceptar las empresas exportadoras de los Estados Unidos.
Pero, para colmo de males se han producido últimamente los huracanes, que han afectado fuertemente toda la zona de Texas y han perjudicado la producción de varias refinerías en la región, entre otras la de Corpus Cristi, que es una de Citgo. Cuando uno va sumando la falta de personal, falta de inversiones en mantenimiento, problemas que acarrearon esa situación, el incendio en el año 20 12 de la principal refinería venezolana, la de Amuay, las dificultades que han tenido las plantas de catalítico que han impedido que funcionen y haber dejado de producir 650 mil barriles de gasolina, motivo por el cual parte se importa al igual que los aditivos, tenemos una clara explicación de la situación.
-Pero, ¿esta situación podría aliviarse?
-Es lo que se espera. Pero, en 18 meses la producción ha caído 450 mil barriles diarios. Pero, sumados todos los factores que he mencionado, la situación realmente es preocupante.¿Cómo ve usted la decisión del Gobierno de apartar el dólar en las transacciones petroleras por el yuan?-Es un absurdo como cualquier otro. Estamos importando de Estados Unidos cantidades importantes de gasolina y aditivos; pero, si el Gobierno pretende pagar con yuanes, lo mandarán a freír monos. El yuan es una moneda poca utilizada en el comercio internacional, apenas el 1,6 por ciento. Es una moneda contable, porque la moneda interna china es el renmimbi.
¿Esa decisión tiene que ver con la deuda que Venezuela tiene con China, tomando en consideración que este país es el que le ha tendido un salvavidas a Maduro?
-Eso pareciera. Al yuan lo aceptan muy pocos países. No es de ningún beneficio pensar que se puede utilizar esa denominación. Creen los que tienen el Gobierno que China va a sacar del atolladero a Venezuela, asi como en 1961, la Unión Soviética se echó al hombro a Cuba. Rusia está en estos momentos pasando por una severa crisis económica, porque ese país es dependiente del petróleo, cuyo precio ha caído durante tres años. Además tiene graves problemas geopolíticos como Ucrania.
En Sebastopol tiene su principal asiento militar del Mar Negro. Y en Siria la principal tropa Rusia en el Mediterráneo. No está en condiciones de lanzarse a una aventura en Venezuela como lo hizo en Cuba. El Gobierno le está entregando en bandeja de planta sus recursos a China.
Pero, esta nación que durante casi tres década pudo lograr tasas de crecimiento superior a dos digitos, debido a que crearon zonas especiales que recibían inversiones extranjeras pero descuidó lo que ocurría en el interior, donde se mantenía su pobreza ancestral. Al cambiar su estrategia hacia el crecimiento doméstico sacrificó su tasa de crecimiento económico. Tampoco está en condiciones de emprender aventuras.
Su gobierno es pragmático. Lo ,dogmático lo pusieron a un lado. Mao es una referencia histórica, enterrado en una equina de la plaza Tiananmén.
¿En qué forma ha afectado a la economía nacional las medidas tomadas por el presidente de los Estados Unidos?
-Las sanciones estrangularon la yugular financiera del régimen, que tiene déficit fiscal inmanejable. Por la caída del ingreso del petróleo, tiene dos alternativas: uno, el financiamiento externo y el otro, emitir dinero inorgánico. El financiamiento se le ha bloqueado a Venezuela porque calificadoras de riesgo han venido disminuyendo el rating del país La calificadora que más duramente trata a Venezuela es la china Dagong Global Credit Rating.
El 60 por ciento de las operaciones financieras se realiza en los Estados Unidos. Es por ello que las sanciones sí afectan financieramente al Gobierno de manera importante y a PDVSA. No le queda sino pedirle a China y Rusia, pero no creo que estos accedan a suministrarles créditos.
O pedirle al Banco Central de Venezuela, dinero; pero esas emisiones son la principal causa de la inflación. Como el Gobierno no está dando dólares para la compra de bienes, los importadores están utilizando el dólar paralelo y se elevan los precios de los productos importados.
¿Cómo han quedado los tenedores de bonos venezolanos desde que se anunciaron esas medidas del gobierno norteamericano?
-La deuda vieja no está afectada por las sanciones a menos que el gobierno caiga en default. La afectada es la que está en manos del propio Gobierno. Es de señalar que los bonos que vendió el BCV con descuento del 70 por ciento representan una enorme pérdida al término de su vencimiento. Y ahora no es posible colocar nuevos bonos en los mercados internacionales.
