Drones y satélites han unido a dos empresas españolas en el desarrollo de un proyecto que responda a la rápida necesidad de localizar un vertido en el mar, cuando este se produce. Los sistemas inteligente funcionan gracias al análisis de imágenes que den la voz de alamar ante la presencia de sustancias contaminantes.
El equipo que forma el proyecto «Brainport» tiene a siete ingenieros que trabajan desde hace un año en Álava para facilitar en un futuro las tareas de Salvamento Marítimo o autoridades portuarias. Las empresas Airestudio y Ibermática han confinado su fábrica de ideas al servicio de la preservación del medio ambiente acuático.
El proyecto ha entrado en una segunda fase y podría estar activo dentro de seis meses. «Ahora estamos empezando a tantear el mercado para ver las posibilidades de venta y cuáles son las necesidades concretas de cada usuario de este servicio», ha explicado el ingeniero de Airestudio Lorenzo Díaz de Apodaca a EFE.
De la mano de Airestudio aportna el tratamiento de la información, mientras que por parte de Ibermática el desarrollo informático. Esta iniciativa cuenta con el apoyo económico del Gobierno Vasco, así como ya han comenzado a contactar con organismos como Salvamento Marítimo en España, Portugal y Latinoamérica.
Gracias al intercambio de información, se pueden incorporar nuevas herramientas al sistema, que funciona con la información de satélites o drones. «Cuando le llegan las fotos el software inteligente va marcando diferentes patrones: vertidos de crudo, barcos, la costa, etc.», ha señalado Aitor Moreno de Ibermática a EFE.
Prever los cambios
De esta manera, se pone a entrar el sistema para que se establezcan patrones de comportamiento y aprenda a identificar en una imagen las peculiaridades que supone un vertido en el agua. Así, se activa un protocolo que deriva en una alerta automática ante la localización de un posible vertido. Por otro lado, el sistema de inteligencia artificial no solo aprender a reconocer manchas en el agua, sino que puede prever la evolución de un contaminante en las siguientes horas.
El equipo del proyecto está diseñando además una plataforma para rastrear continuamente las rutas marítimas más transitadas mediante satélites «que pasan de forma diaria sobre el mismo punto» para acelerar la localización de los vertidos. En contra, para los puertos plantear utilizar drones que tengan la función de hacer el seguimiento y control de los barcos que supongan un peligro y estén próximos a la costa.
