”Sobre la destitución del ingeniero Landys Navarro como presidente de la empresa Sistema Hidráulico Yacambú Quíbor y la situación actual de la obra se mantiene un absoluto secretismo desde el gobierno”, declaró el diputado larense a la Asamblea Legislativa.
Como informó El Impulso el fin de semana, el ingeniero Navarro fue sustituido por el mayor general de la aviación Yván Isaac Camejo Mujica, aunque el resto de la directiva continúa inalterable.
Sobre la designación, Palacios señala que “se alargan los tentáculos militares en cargos de la administración pública antes ejercidas por civilles, lo que corrobora que este es un régien militar donde se ha impuesto la autocracia y el totalitarismo”.
Considera que el cambio de directiva no es suficiente para recuperar lo que había hecho hasta ahora de tan importante obra hidráulica a la que durante años se le han asignado suficientes recursos que han sido saqueados y en la actualidad se encuentra desmantelada por completo, como se ha denunciado en varias oportunidades.
Igualmente estima que muchos de esos recursos han sido aprovechados de manera personal por algunos de los funcionarios que han actuado como administradores.
“También es público y notorio que parte de los millones de bolívares y dólares asignados por el gobierno Nacional fueron invertidos en el financiamiento de campañas electorales”, agregó. Enfatizó en que el gobierno Nacional, o el nuevo presidente de la empresa Sistema Hidráulico Yacambú Quíbor, tan pronto disponga de una información objetiva de lo que aún queda en el túnel de trasvase y en los portales de entrada y salida, en los municipios Andrés Eloy Blanco y Jiménez, informe a la colectividad larense la situación real de las instalaciones que, prácticamente, fueron saqueadas descaradamente sin importarle nada a quienes tenían la responsabilidad de impedirlo.
El diputado Guillermo Palacios, desde hace tiempo, ha venido denunciando las irregularidades que, presuntamente, se han estado cometiendo en la obra de la que los larenses habían cifrado muchas esperanzas porque, de ser concluida, garantizaría el suministro de agua para millares de hectáreas de tierras fértiles en el Valle de Quíbor y el abastecimiento de varias ciudades, comenzando por Barquisimeto.
Espera que el nuevo presidente también ordene una investigación minuciosa sobre la forma como se han invertido los recursos asignados desde los inicios de la obra hasta hace pocos años, concretamente en noviembre del 2015, cuando el presidente Nicolás Maduro le asignó 1.600 millones de bolívares y 3 millones de euro para reanudar los trabajos, lo que no ocurrió pues, al contrario, personas desconocidas robaron materiales de diferentes tipos, así como también maquinarias valiosas, algunas de las cuales nunca fueron utilizadas por no reunir las condiciones necesarias, entre ellas las destinadas al encoframiento del túnel de trasvase.