Nuestra hermosa capital, siempre, se ha caracterizado por ser la ciudad crepuscular o musical de Venezuela; sin embargo, también cuenta con un atractivo arquitectónico que, con el paso de los años, ha adquirido mayor relevancia. Su icónico obelisco próximo a cumplir 65 años, la Catedral de Nuestra Señora del Carmen o Catedral de Barquisimeto que goza de una imponente estructura y más reciente, el Monumento Manto de María Divina Pastora, considerado el monumento mariano más alto del mundo, son referencias de las diversas construcciones que hacen gala dentro una ciudad, enmarcada por los atardeceres más fascinantes del mundo.
Por ello, en esta ocasión traemos hasta nuestras páginas, uno de los templos más distintivos, por su construcción, que tenemos. Se encuentra ubicado en la carrera 23 entre calles 31 y 32, siendo imposible perderlo de vista pues su estilo gótico, nos traslada a la Europa Occidental de la Edad Media, donde las edificaciones más opulentas y representativas de este arte se erguían en las ciudades.
Hablamos de la Basílica del Santo Cristo de la Gracia o Basílica Menor Santo Cristo de la Gracia, este último nombre otorgado por el papa Juan Pablo II, en el año 1994. Posee una torre principal de 53 metros de altura, en su interior podemos apreciar tres naves: la central de 25 metros de alto y las laterales de 12 metros, no obstante, lo que nos deja con la boca abierta al visitarla, son más de 50 vitrales, creados por un artesano en Boconó, Estado Trujillo; todo esto, soportado por una base de 12 metros cuadrados.
Llegado el 28 de abril del año 1940, monseñor Enrique María Dubuc, obispo de Barquisimeto para aquel entonces, coloca y bendice la primera piedra sobre la cual se levantaría esta estructura; así pasaron algunos años en los que el proceso de la obra se vio paralizado, hasta que finalizando la década, se retoma el trabajo y no es, sino, hasta el 30 de octubre del año 1955 cuando el templo es bendecido por Monseñor Benítez Fontuvel.
Podríamos decir, que uno de los tesoros que guarda esta joya arquitectónica es una imagen del Santo Cristo de la Gracia, con tres metros de alto y tallado en madera, este también sigue la línea del arte gótico y reposa sobre un altar de madera y bronce.
Aunque sabemos que es una obra ordenada por la congregación de Padres Pasionistas y levantada gracias a la mano de obra de muchos venezolanos, desconocemos el nombre del arquitecto encargado de su construcción. No obstante, nos sentimos honrados de tener una basílica tan preciosamente conservada y convertida en punto de referencia dentro de nuestra ciudad.
