Funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) del estado Lara practicaron la detención de un joven por supuestamente participar en la agresión a dos sargentos de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), suscitada el pasado 28 de julio de 2017 en el parque Cardenalito de Barquisimeto.
Según el parte policial, la aprehensión fue practicada el pasado lunes en el Club Hípico Las Trinitarias, a eso de las 4:00 p.m., por sabuesos de la subdelegación Barquisimeto.
Ayrton Gabriel Giménez Bracho, de 22 años de edad, presuntamente fue uno de los jóvenes encapuchados que ese viernes sometieron a par de militares (Uciel Davis Vargas Orozco y Carlos Julio Arocha Colinas, sargentos segundos de la GNB) que viajaban en buseta de Acarigua hacia Barquisimeto, para luego golpearlos, desnudarlos y producir quemaduras aparentemente con gasolina.
Posteriormente los guardias fueron liberados y tuvieron que caminar sin vestiduras hasta ser auxiliados por un conductor. Después, los trasladaron al Hospital Militar José Ángel Álamo de la urbe crepuscular.
Los castrenses adscritos a la empresa Agrícola de la Fuerza Armada Nacional (Agrofan) que funciona en Acarigua, estado Portuguesa, estaban francos de servicio.
Según reza la versión de las autoridades a Giménez Bracho le habrían incautado tres escudos de madera tricolores, tres cascos de seguridad y 27 bombas molotov.
“En un sistema de justicia normal ya estuviese libre”
Para el coordinador de la asociación civil Funpaz, Andrés Colmenárez, la aprehensión de Ayrton Gabriel Giménez Bracho fue completamente arbitraria e irregular, puesto que este se practicó sin testigos, sin orden judicial y con fuerza desmedida.
Además de ello, contó Colmenárez a EL IMPULSO, familiares del joven no supieron nada de él sino hasta 48 horas después de su captura, cuando el muchacho fue llevado a los tribunales larenses para la audiencia de presentación que fue suspendida.
“En materia de Derechos Humanos a eso se le llama de desaparición forzada. Es cuando lo trasladan que abogados pudieron constatar su estado de salud, está golpeado (…) En un sistema de justicia normal ese muchacho ya estuviese en libertad tan solo porque el debido proceso no se respetó”, dijo el fundador de Funpaz.
Acotó que la irrupción del Cicpc en la vivienda de Ayrton fue a las 9:00 a.m. en El Ujano.
Comentó que los familiares del detenido aseguran que este no se encontraba en la ciudad cuando ocurrió el hecho del que lo acusan.
Asimismo, afirmó que habría otro chamo detenido por el mismo caso, aunque están averiguando la identidad de esta persona.
“Estamos observando con preocupación un patrón de cacería en contra de los muchachos que participaron en la protestas ciudadanas. Estimábamos que se iba a dar esta situación por las declaraciones oficiales (…) No podemos rechazar que los organismos realicen las investigaciones, pero sí exhortamos a que se realice el debido proceso”, sentenció.