El Deportivo Lara continúa con paso arrollador. Los rojinegros consiguieron su cuarta victoria en el torneo Clausura de primera división, la sexta en fila en el semestre, y ascendieron al segundo escaño de la clasificación general con 15 puntos, a uno de Mineros de Guayana, que venció y mantuvo la hegemonía.
El equipo crepuscular de nuevo estuvo solvente contra el Atlético Socopó en suelo barinés. La victoria 2-0 extiende el idilio con el triunfo y aún lo deja invicto en el semestre, por lo que no hay duda de que atraviesa el mejor momento de todo el año.
La defensa de la oncena guara no falló en un terreno de menos dimensiones que el Metropolitano de Cabudare. Esta vez, al equipo que dirige Leo González le costó más vulnerar la valla del Socopó, pero pudo resolver el partido con par de dianas en menos de 20 minutos de Carlos Sierra (73) y Jesús “Patoncito” González (89).
“No era un partido fácil, pero el equipo estuvo a la altura. Estoy contento por el gol, pero lo importante es que todos estamos dispuestos a aportar nuestro granito de arena cuando nos necesiten, ya sea de titular o suplente”, declaró González al equipo de prensa del rojinegro.
Para este careo fueron seis las variantes en el once titular y le volvió a dar frutos. El rojinegro colocó en cancha a una plantilla con mayor bagaje, en comparación con la que había goleado al Atlético Guanare en Copa Venezuela a mitad de semana para avanzar a octavos.
El Deportivo Lara se mantiene como el club que menos goles ha recibido en el Clausura (2). La ofensiva ya suma siete dianas, una de los registros más bajos entre los que ahora se pelean la punta.
El cuadro larense comprobó la buena forma física, en parte por la amplia rotación, al vencer en su quinto partido en 15 días, duelo realizado sobre un escenario que siempre exige en lo físico por las altas temperaturas.
El orden ha sido el principal bastión que tiene al equipo larense en la pugna por la cima de la clasificación del Clausura. Este trabajo lo realza el asistente técnico Pedro Vera, quien también es consciente de que gozan de un buen momento, pero aboga porque el equipo se mantenga enfocado.
“No hay que alegrarse mucho porque en el fútbol se es como un ascensor, se sube y baja. Hay que estar con los pies sobre la tierra pero con mirada al cielo e ir partido por partido”, afirmó.
Vera también consideró clave que se prolongue el sacrificio para mantener el buen ritmo de juego y evitar que el equipo no desmaye como ocurrió en el Apertura.
“En el semestre pasado sacamos muchos ceros, pero en los últimos nueve juegos sumamos dos puntos de 27”, comentó.
El asistente técnico enfatizó que el primer objetivo del club es evitar que le hagan goles. También tiene como principio conservar el orden para luego desarrollar otras facetas de juego.
El Deportivo Lara asumirá una semana de recuperación física y preparará el partido de la octava fecha contra el Deportivo Táchira, que se realizará el próximo sábado en el estadio Metropolitano de Cabudare.
