El humorista y actor estadounidense Jerry Lewis, que se desenvolvió tanto en el escenario como detrás de cámaras a lo largo de una carrera de seis décadas, murió este domingo a los 91 años, dijo su agente.
Uno de los cómicos más populares de los años 50 y 60 en Estados Unidos, Lewis perfeccionó el rol de tonto payaso en comedias visuales como «The Nutty Professor» («El profesor chiflado»), pero ganó reconocimiento también como escritor, actor y filántropo.
«Muy tristemente Jerry Lewis ha muerto», dijo su agente Jeff Wijtas a AFP. La revista especializada Variety había informado que el actor falleció en su domicilio de Las Vegas la mañana del domingo.
Artista completo, creador incansable de piezas de humor esencialmente visual, Lewis fue conocido tanto por sus esfuerzos para crear conciencia sobre la distrofia muscular como por su icónica marca de comedia física.
Nacido Joseph Levitch en Newark (Nueva Jersey, este), el 16 de marzo de 1926, en una familia de artistas judíos de origen ruso, salió al escenario a la corta edad de 5 años.
Luego de probar suerte en la escena en Nueva York, todo cambió a los 20 años, cuando se embarcó en quizás una de las sociedades más exitosas del entretenimiento con el cantante Dean Martin.
Lewis y Martin se retroalimentaban mutuamente en sketchs cómicos, hoy considerados clásicos, poblados de caídas, golpes y mucha agua. Firmaron un contrato a largo plazo con los estudios de cine Paramount Pictures.
En más de 50 años, sus películas recaudaron 800 millones de dólares, una cifra impresionante dado que los billetes de cine no costaban más de 50 centavos en el apogeo de su popularidad.
En años recientes, estuvo plagado con problemas de salud, y fue declarado clínicamente muerto en 1982 tras un infarto. Diez años después fue diagnosticado con cáncer de próstata y en 1997 con diabetes.
Pero siguió trabajando, incluyendo una adaptación musical de «El profesor chiflado», tan recientemente como 2011.