Sobre una de las aceras de la carrera 31, entre calles 25 y 26 de Barquisimeto, quedó su cuerpo sin vida. Los vecinos quedaron espantados tras encontrarse con una escena del crimen al salir de sus hogares, la mañana de este miércoles, aunque una detonación en horas de la madrugada -aproximadamente a las 4:00 a.m.- les había alertado que pasaba algo.
Su nombre era Cruz Mario Rodríguez; tenía 40 años de edad. Su cadáver yacía en el pavimento de manera perpendicular a la fachada de una vivienda que exhibía par de tejas tumbadas. Restos del tejado se observaban alrededor del occiso.
“Por aquí era sano pero de dos años para acá se ha puesto terriblemente peligroso. Han robado demasiado, a quienes llegan tarde y a quienes salen temprano. Se meten en los negocios y las casas para llevarse lo que encuentren (…) Primera vez que hay un muerto por aquí”, comentaron a EL IMPULSO vecinos de la comunidad Caribean de la ciudad crepuscular.
El occiso, comentaron algunos conocidos en el sitio del suceso, residía en la calle 26 con carrera 28 de la capital larense; a pocas cuadras de donde fue liquidado.
Residentes del sector confesaron ver al difunto casi de manera diaria por la zona, a bordo de una bicicleta. Contaron que era mecánico y trabajaba cerca de su vivienda, en la que pernoctaba solo, puesto que sus dos hijas se encuentran fuera de la región.
La causa de muerte de Cruz Mario, fue una descarga de escopeta que recibió en su costado derecho. A eso de las 9:00 a.m., una comisión del Eje de Homicidios Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) en Lara realizó el levantamiento del cadáver. Estos sabuesos determinarán a ciencia cierta lo ocurrido.