Continúa la temporada vacacional. Más de 1.500 niños fueron protagonistas de la aventura ecológica ofrecida por los guías y recreadores del Bosque Macuto en los últimos meses.
Los pequeños reciben una atención personalizada a través de una visita guiada. Y conocen de primera mano el primer bosque periurbano decretado en Sudamérica. Al igual que cada una de sus historias, plantas autóctonas y la importancia del bosque como reserva de biodiversidad. Toda una experiencia ambiental.
El Bosque Macuto recibió su nombre en honor a Guaicamacuto, cacique de una tribu de indígenas de la zona. Los niños reciben una visita guiada a través cada uno de los atractivos del parque.
La primera parada es la Casa de las Lombrices. Allí les explican a los participantes el proceso de la lombricultura y como se realiza aquel tipo de abono natural que produce la lombriz roja californiana. En el segundo punto se habla de los diferentes tipos de plantas y árboles que hay, que pueden ser: ornamentales, que embellecen las casas; frutales; medicinales, que sirven para algún tratamiento; y las forestales que son las que se encuentran en los bosques.
Tal y como lo explicó el guía turístico Simón Camacaro, los grupos recorren el parque durante todo el día; desde las 8:00 de la mañana hasta las 4:00 de la tarde. Y pasan todo el día entre conocer el bosque, participar en actividades recreativas, deportivas, culturales y ambientales.
Uno de los centros más anhelados es la granja de contacto. Camacaro indica que allí reciben instrucción sobre cada una de las especies de aves y mamíferos que allí habitan.
Incluso pueden hacer el contacto de darles el alimento a los animales que están allí en la granja. El emblema del bosque se llama Alberto, es un toro de raza colombiana. En el zoológico de contacto hay 15 especies, entre ellos: burros, chivos, ovejas, yeguas, patos, gansos, vacas, e incluso avestruces.
La gerente de sistemabilidad, Rosibel Alvarado, expresó la importancia que los niños adquieran conocimientos autóctonos, de procesos biológicos, y todo lo que puedan aprender de sus raíces y a lo que se dedicaban sus ancestros. Resaltó la siembra de plantas medicinales, en su opinión, una costumbre que se perdió y es una opción para no depender solamente de la medicina tradicional.
“El Bosque Macuto le permite a los chamos en estas vacaciones y durante todo el año a las personas que nos visitan, conocer de nuestras tradiciones y costumbres”, destacó Alvarado.
El itinerario continúa en el serpentario, sitio donde hay una diversidad de reptiles, serpientes, culebras y camaleones. En total 22 especies, desde tragavenados, mapanares y culebras.
En el sendero se hace un recorrido e interpretación de la naturaleza. En seis estaciones se explica la fauna y flora autóctona y todos los procesos de la naturaleza que se dan en ese trayecto, llegando a lo que son las primeras piscinas públicas construidos en Venezuela. 40 minutos que se debe hacer con ropa deportiva, zapatos cómodos y llevar hidratación para conocer su historia.
La temporada vacacional será hasta el 15 de septiembre. Sin embargo, luego de que termine seguirán recibiendo grupos tanto de comunidades, empresas o escuelas que quieran venir y hacer sus visitadas guiadas y recorridos. La temporada cerrará con un campamento el sábado 9 de septiembre, para niños a partir de los 13 años, quienes pernoctarán dentro del parque para hacer actividades nocturnas y recorridos. Quienes desean participar dentro del parque deben contactar al correo: comercializació[email protected].
Sazón Criollo
Cada viernes se efectúa un taller que lleva por nombre Sazón Criollo. El objetivo del mismo es dictar recetas de comida para enseñarle a miembros de la comunidad a preparar recetas que active su creatividad en la cocina, con el fin de recuperar todas esas recetas autóctonas de los indígenas.
Mirelbis Cuevas, quien dirige este programa, comentó que cada viernes se reúnen con los miembros de la comunidad y entre todos preparan platillos como: arepa de yuca, pastel de apio y tortas sin harina. Cuevas agregó que con esto desean que la gente aprenda y ponga a trabajar su creatividad con los ingredientes que tienen en casa.
“No nos podemos dejar afectar por la guerra económica que tiene el país. Tenemos que resolver desde nuestros hogares. La primera etapa de Sazón Criollo fue con los adultos, y recién comenzamos con la parte infantil del programa”.
