Casi un siglo vivió este hombre, profundamente ligado a la actividad agrícola, la cultura y la lucha política desde muy temprana edad.
José Felipe Alvarado nació en Santa Rita, el 23 de agosto de 1917, fue hijo de María Filomena Alvarado y José Silvino Pérez, campesino aguerrido, quien anduvo con el General Montilla, El Tigre de Guaitó.
José Felipe muy joven se incorporó a la célula “José Stalin” del Partido Comunista y formó parte del movimiento campesino tocuyano desde los años treinta.
Junto a Melecio Aguilar, Bartolo Colmenares, entre muchos otros, estuvo entre los líderes de la primera huelga campesina de El Tocuyo de 1936, lo que le valdría el nombre de Zona Roja a la vieja urbe, fundamentalmente al sector de Guajira y El Molino. Junto a otro centenario luchador, Bernabé Quintero, compartió buena parte de su vida, en la casa de Bernabé (quien murió en el 2009), en la Urbanización Roberto Montesinos, pasó los últimos días de su vida recibiendo la asistencia de parte de sus familiares y amigos. Estuvo casado con Clementina Pérez.
José Felipe se enfrentó contra la dictadura de Pérez Jiménez y luego en los sesenta se incorpora al movimiento guerrillero, en el Frente Simón Bolívar, acompañando a Argimiro Gabaldón. Perseguido y pagó con cárcel en varias oportunidades, igual suerte corrieron sus hermanos y esposa. Fue además de luchador político connotado maestro del juego del garrote, alumno del gran maestro León Valera, de quien aprende el Juego de “Las Siete Líneas”, y al cual homenajearía fundando una escuela con su nombre. Jugaba con su hermano Leonardo y el maestro Santo Pérez, entre otros.
Hombre sabio, aguerrido, de palabra directa y franca. Aún lo recordamos, un año antes de su muerte, en un programa televisivo, hablando con firmeza al presidente Chávez. Muere en su caserío El Molino, donde siempre vivió, el 4 de junio del 2010.
Lamentablemente no pudo asistir al encuentro de jugadores de garrote, que en su nombre se escenifico frente a la iglesia de la Inmaculada Concepción el 6 de junio, organizado por el Museo Lisandro Alvarado y la Fundación Escuela de Garrote Tocuyano León Valera. Pero quedaron algunos de sus alumnos, como su sobrina Cristina Alvarado, Víctor Domínguez, Ronald Izaguirre, Pascual Sanfino, Salomón Pérez, Isaías Colmenarez, Jonny Pérez, Juan Yépez, Larry Sánchez, Yuri Rodríguez, Julio Carrillo, Hunter Morales, entre otros, garantes de que este juego y arte tocuyano no se muera.
