Sector cañicultor nacional muestra las cicatrices de políticas económicas erradas. Entre estas el control de precios.
En Lara la producción de caña de azúcar es cada vez menor y esto es consecuencia de la falta de condiciones para mantener y aumentar la producción del rubro, debido a que los ingresos no son suficientes para sostener la faena en medio de un complicado proceso inflacionario.
Al respecto, Edgar Contreras, directivo de la Sociedad de Cañicultores del Occidente de Lara (Socadol), detalló que el ingreso del productor por kilogramo de azúcar generado son Bs. 800, lo cual sostienen es insuficiente.
Con base en su experiencia, sostienen que los precios impuestos por el Gobierno a través de gacetas, “nunca dieron con el valor justo”.
Ante lo que consideran la destrucción del sector, se declaran aún más afectados, al encontrar que, motivado a la escasez del producto por caída productiva, se vende el kilogramo de azúcar de manera informal y especulativa hasta en Bs. 10.000.
“Los que no son productores obtienen más ingreso que nosotros…. Pero los que debemos cuidar y tratar la caña durante un año, somos nosotros”, expresó.
El precio del momento
Según cálculos del sector en Lara el valor en anaquel del kilogramo de azúcar debe ser de Bs. 6.000, lo cual le permitiría al productor obtener un ingreso por igual cantidad de Bs. 3.600, que señaló que sería un monto mucho más ajustado a la realidad y les permitiría recuperarse progresivamente como sector.
Recordó que el sector agrícola nacional, sin importar rubro, atraviesa un grave déficit de insumos y agroquímicos, lo cual limita los niveles de rentabilidad de las pocas hectáreas en producción.
A esto se suma que la transferencia de la venta de fertilizantes de la Petroquímica de Venezuela (Pequiven) a Agropatria, ha incrementado los costos de venta.
Además de escasos, los insumos agrícolas, por venta oficial, también se han hecho costosos.
