Diputados de la fracción parlamentaria del movimiento político, Vente Venezuela, aseguraron este miércoles que no pueden cohabitar con una Asamblea Nacional Constituyente que ha empleado una violencia franca y abierta para imponerse en el país.
Mediante un comunicado de prensa, los diputados rechazaron la instalación de la «espuria constituyente madurista» y exigieron la inmediata desocupación del Palacio Federal Legislativo por parte de los falsos constituyentistas.
Para los también dirigentes opositores, la forma cómo los oficialistas ingresaron al hemiciclo protocolar acarrea serias y severas responsabilidades de índole civil y penal.
“La mañana de este martes, la Guardia Nacional, en connivencia con los grupos paramilitares afectos a la dictadura, no permitió que los diputados electos libre, directa, universal y secretamente por la ciudadanía accediesen a su lugar natural de trabajo”, denunció Luis Barragán, parlamentario por el estado Aragua.
Explicó además que fue violada la inmunidad parlamentaria y la sede ocupada sin la debida y necesaria autorización de la Asamblea Nacional.
“Ya habían ocupado el Salón Elíptico, violentado sus puertas, a pesar de la fragilidad de todo un referente histórico y arquitectónico, y ahora, extendiéndose, aspiran a copar todos los espacios, incluyendo los administrativos, por vía de una violencia inaceptable. A todas luces, violentan la Constitución de la República que, expresa e inequívocamente, contempla la independencia de un órgano del Poder Público como la Asamblea Nacional”, agregó.
Barragán indicó que, de acuerdo con el artículo 65 del Reglamento de Interior y de Debates, la unidad militar que se encuentra enquistada en el Palacio Legislativo depende de las autorizaciones emanadas de la Presidencia de la Asamblea Nacional.
“Siendo la Guardia Nacional un componente de la Fuerza Armada Nacional, debe ser y estar completamente ajena a cualquier parcialidad política e ideológica, según el artículo 328 constitucional”, sumó el vocero.
A las demás fracciones parlamentarias les exigió una postura clara, firme y consecuente con el compromiso contraído con el electorado, no postergando más un debate orientado a reivindicar a la institución y a la institucionalidad parlamentaria.
“Los comicios regionales y las otras vicisitudes que suelen ocurrírsele a esta dictadura no deben distraernos en la misión y la tarea fundamentales de defender a la Asamblea Nacional que es, en última instancia, defender a las grandes mayorías de los ciudadanos que desesperan bajo esta dictadura”, concluyó.