Trabajadores de Hidrolara cerraron el paso vehicular en la carrera 19 con calle 23, a la altura de la gobernación del estado Lara. Su objetivo era hacerse escuchar y reclamar el pago de los cuatro meses de salario que les debe la empresa.
Son más de 700 trabajadores, adscritos a siete cooperativas, los que afirman verse afectados por el retraso en su pago. Algunos consideran que al no contar con recursos se les hace difícil adquirir los artículos básicos para alimentar a sus familias, puesto que el precio de estos incrementa diariamente.
Ghezzi Pineda, trabajadora, denuncia que ellos no paran su labor en ningún momento de los 365 días del año, al tener un compromiso que saben afecta directamente a las comunidades, por eso, piden que sea el dinero abonado a sus cuentas cada 30 días.
“Acumular cuatro meses de deuda, más estos días que van corriendo, es demasiado e insostenible. Necesitamos cobrar porque todos somos padres de familia, nadie puede aguantar 60 días sin ver un centavo. Queremos el pago y el respeto al trabajador”.
El obrero Alfredo Mujica indicó que dentro de su organización nadie les da una respuesta, su solicitud es que el gobernador Henri Falcón los atienda y puedan dialogar una solución y respuesta a cada uno de los problemas que afrontan los operadores que laboran en Hidrolara.
Por su parte, Richard Mosquera comentó que su llamado también va destinado al Gobierno nacional. Considera que están siendo manipulados los recursos que pertenecen al estado Lara. Así mismo pide que sea ajustada la tarifa del agua. Mosquera Informó que tan solo es cobrado el servicio a 500 mil habitantes de todo el estado Lara, puesto que en los barrios y caserías el servicio es subsidiado; además quienes cancelan solamente les son cobrados 2.000 bolívares mensuales.
“Esos 2.000 bolívares que se cobran, no alcanza para que Hidrolara pueda cumplir con su masa trabajadora. Ni siquiera le da para los costos operativos de esta empresa. Y luego salen los diputados del Consejo Legislativo diciendo que no pueden seguir aumentando las tarifas al pueblo, pero si siguen así jamás tendrán como pagarnos a nosotros. Dependemos de ese dinero”, expresó Mosquera.
Así mismo destacó que de no existir una pronta solución, ellos con tan solo una llamada pueden suspender la distribución del agua en todo el estado Lara; situación a la que esperan no llegar por respeto a las personas enfermas y niños que se mantienen de tomar agua, porque en su opinión ni siquiera algo de comer tienen para cenar.
“No queremos ocasionar un malestar más a la comunidad, pero nuestro llamado es que se haga un estudio y se cobre el precio real del producto. No nos estamos parcializando, estamos hablando claro al Gobierno de lo que sucede. No queremos causarle un problema al estado Lara, pero todos tienen que conocer que Hidrolara sufre un problema técnico”.
Por su parte, César Valera agregó la inmensa inseguridad que viven en cada una de las estaciones, y que al realizar un simple recorrido por ellas es notable su estado deplorable sin iluminaria, totalmente descuidadas.
