Los restos de Luis Zambrano Lucena fueron enterrados con una emotiva despedida. El deportista que perdió su vida luego de recibir un disparo en su cabeza, por parte de un funcionario de la guardia nacional en medio de una protesta, fue acompañado por sus familiares, amigos y compañeros, hasta su tumba.
El cuerpo de Luis Zambrano fue velado la noche de este lunes en la Funeraria Metropolitana. Zambrano laboraba como transportista escolar para niños en el colegio San Pedro. Los pequeños a los cuales les ofrecía el servicio, le fueron a dar un último adiós mientras le entregaban flores de distintos tipos.
En la mañana de ayer sus seres queridos partieron junto al féretro hacia el Cementerio Metropolitano del Este.
No fue una tradicional caravana de despedida. Al menos 40 ciclistas y 20 corredores participaron en ella. Deportistas de las fundaciones Lara Corre Unida y Mata Rata homenajearon a su amigo.
Algunos compañeros comentaron que corrían con él por última vez con un gran dolor en su alma, pero se sentían orgullosos de la huella que Luis había dejado en sus vidas a ser ejemplo de alegría, optimismo, solidaridad y humildad.
Valentina Urbana, miembro del grupo Lara Corre Unida y amiga de Luis, comentó que todos se sienten muy indignados y por ello decidieron que seguirán luchando y no permitirán que un pequeño grupo de personas le roben al país a quienes luchan con fuerzas y esperanzas. Recordó que Luis sabía que estaba haciendo lo correcto y siempre participaba en carreras en apoyo a las urbanizaciones reprimidas como la Sucre y Villa Roca, y junto a los luchadores cantaba las gloriosas notas del Himno Nacional.
“Seguiremos con el ejemplo y entusiasmo que nos dejo Luis. Los principios y valores no son negociables y los venezolanos sabemos que se necesita mejorar y un cambio”.
