La defensa ha sacado la cara en los primeros dos compromisos, un cambio rotundo a lo que fue el equipo durante la primera mitad del campeonato, aquel Apertura en el que se desinfló por las displicencias en la retaguardia producto de la desconcentración.
Ahora la duda cierne sobre el ataque rojinegro que ha salido en blanco en 180 minutos. Aunque se hayan intentado algunas variantes para buscar el gol, todavía el Deportivo Lara no ha dado el primer zarpazo que le quite el aliento por la celebración de la primera diana.
Lo cierto del caso es que la oncena crepuscular suma 11 partidos sin conocer la victoria, si se pliega la oscura última parte del Apertura con el inicio de Clausura. De nuevo el rumbo parece no estar claro para el equipo de casa, al menos durante las primeras fechas del Clausura.
Los ajustes en defensa que ha realizado el director técnico Leo González han dado frutos para ser uno de los dos equipos que no ha recibido goles en los primeros dos partidos del certamen. La tranquilidad en la zaga parece llegar tras un amargo Apertura en el que fueron vulnerados por todos los flancos.
El empate contra Mineros le sirvió al Deportivo Lara para situarse en el décimo segundo peldaño de la clasificación general. Aunque el cuadro se muestra solvente en el quehacer defensivo, su principal objetivo en el inicio, la plantilla ya ha cedido cuatro unidades sobre Estudiantes de Mérida, líder con seis puntos.
La disposición ofensiva del rojinegro no lució aminorada de un todo frente a Mineros, porque generó sus ocasiones de gol, pero sí se mostró inefectividad. Ahora se revierte el escenario del Apertura: mientras no haya goles se torna cuesta arriba sumar de a tres unidades, un clamor para el grupo de González.
Las piezas nuevas que integró el mandamás rojinegro no dieron cuenta durante en el segundo careo, al argentino Lucas Gómez y a José Caraballo se les hizo cuesta arriba quemar la red; Ely Valderrey tampoco dejó su mejor día y el empate fue un intento fallido por recuperar la senda ganadora.
En frío, una de las nuevas adquisiciones, Giácomo Di Giorgi analiza que para que comiencen a llegar los goles el equipo necesita cohesionarse más en el último cuarto de cancha.
“La defensa está muy sólida, en la delantera no falta asociarse sino tomar un momento para levantar la cabeza y ver el compañero que esté mejor ubicado porque hemos generado ocasiones de peligro”, declaró el jugador el equipo de prensa del Deportivo Lara.
Sobre el segundo empate consecutivo sin goles en lo que va de Clausura, Di Giorgi expresó que no fue justo porque el equipo generó más oportunidades para quemar la red que el rival, pero se hizo esquivo el gol.
“No creo que haya sido justo el empate, nosotros generamos más y tuvimos mayor tiempo la pelota, dejamos ocasiones con mucha claridad, al final nos llevamos un punto, no era lo que queríamos. Ahora tendremos unos días para corregir y mejorar en todas las facetas de juego”, señaló.