De 19 años y oriundo de Barinas, el velocista Leángel Linárez se convirtió en hombre noticia en la primera etapa de la Vuelta a Sevilla, en España, después de imponerse en llegada masiva y con ello adueñarse de la camiseta de líder, luego de una jornada de 131 kilómetros, siempre sobre terreno plano.
Linárez logró el triunfo como parte de la escuadra Cartuchos Magro, con la que corre desde este año, en busca de una oportunidad en el ciclismo profesional de aquel país. El llanero llegó bien acomodado en la punta de carrera para hacerle frente al embalaje definitivo y superó por un par de bicicletas, en una contundente demostración, a los también esprinters Manuel Peñalver y a Alex Ulloa.
“Ha sido un embalaje masivo y yo venía con fuerza y entré mejor que nadie en la recta”, señaló Linárez momentos luego de su categórica victoria.
El venezolano correspondió así al gran esfuerzo que hizo kilómetros antes el equipo Cartuchos Magro, porque encabezó una persecución a fondo para capturar a un grupo de fugados y propiciar una llegada en bloque, a sabiendas de que tenía al hombre para ganarla, como en efecto ocurrió.
“El equipo ha trabajado muy bien para tomar a los escapados, que lo han puesto difícil. En un momento pensé que llegaban”, indicó el criollo, quien llegó al mencionado club español por recomendación del también corredor criollo Edwin Torres, quien estuvo allí el año pasado y ahora está en el profesional con el Kuwait Cartuchos.
Linárez, campeón nacional juvenil de ruta en alguna oportunidad, ya hizo una parte del mandado y le resta la más difícil, la de sostener el liderato, algo que, a decir verdad, parece poco probable porque no es un escalador y este domingo, en la segunda y última fracción, está programada una cuota importante de montaña. Sin embargo, advirtió que “trataré de mantener la camiseta de esta bonita Vuelta hasta el final”.
De acuerdo con la información colgada en la página web de la carrera española, la porción de cierre tiene un recorrido total de 115 kilómetros y un par de puertos montañosos en el camino, momentos antes de la llegada.
Linárez procura mantener al Cartuchos Magro como rey vigente de la competencia, ya que la ganó en 2016 con el español Gonzalo Serrano.