Paperos de Lara y Mérida esperan que las unidades estadales del Ministerio de Agricultura Productiva y Tierras les entreguen la certificación de insuficiencia del rubro, como documento necesario para participar como sector productivo en la octava subasta del sistema de Divisas Complementarias (Dicom), a propósito de comprar en el exterior semilla certificada de papa para consumo humano.
La unidad de Carabobo ya otorgó la certificación a los productores del estado, sin embargo, el concurso de los productores por las divisas se hará en conjunto a través de la Federación Nacional de Productores de Papa y Hortalizas de Venezuela (Fenaphort).
Aldemaro Ortega, presidente de la conformación, explicó que la licitación conjunta comprende la participación de 7.000 productores de papa para una intención de siembra de 10.000 hectáreas.
No obstante, lamentan que a pesar de la celeridad con la que han sido atendidos por el viceministerio de Agricultura Productiva, no exista la misma respuesta en los estados.
Esto les afecta por el incremento continuo de la tasa oficial, puesto que el gremio comenzó a gestionar los requisitos luego de la primera subasta Dicom, en la cual se calculó la tasa a Bs./$2.010, no obstante en último llamado se resolvió en Bs./$2.700.
Mientras más tarde los organismos públicos en atender su solicitud, más tarde acudirán a la subasta y más caro pagarán el dólar, lo que seguirá incrementando sus costos de producción, los cuales aseveró que son imposibles de calcular a la fecha.
“No queremos seguir siendo víctimas de la burocracia y ya que el Estado no importa la semilla, queremos hacerlo por nuestra cuenta y a la tasa Dicom”, comentó Ortega, quien cuestionó que “dos unidades estadales tengan trancadas las aspiraciones del sector”, manifestó.
Desde hace dos semanas esperan esta certificación.
Ortega hizo la salvedad que la importación de la semilla aún estaría dentro de los ciclos establecidos. Sin embargo, pide se agilice el trámite para “no perder más tiempo” y producir para el país.
Papa para Lara
Lara y Mérida llevan tres años sin recibir semilla certificada por parte del Gobierno, al igual que Mérida, por lo tanto, productores de ambos estados han multiplicado la semilla o “dado la vuelta” como ellos mismos llaman al proceso de resembrar la papa de ciclos anteriores, en seis oportunidades.
El estimado recomendado por razones genéticas es de cuatro veces. Allí reside la razón por la cual los productores obtienen rentabilidades por hectárea cada vez más bajas.
En esta propuesta participarán 1.500 productores larenses, para la importación de semilla de papa variedad Atlantic (uso industrial) y variedad Kennedy, de consumo fresco para humanos.
La intención de siembra en el estado es de 2.000 hectáreas aproximadamente.
