Vimala McClure, es el nombre de la norteamericana, fundadora de La Asociación Internacional de Masaje Infantil (IAIM, sus siglas en inglés). En la década de los 70, esta notable mujer, trajo a Occidente aquello que había experimentado en la India, una mejor forma de conectarse y estrechar lazos con los bebés, era el arte de dar masajes, que combinado con sus conocimientos en masaje sueco y yoga le permitieron crear una combinación perfecta de técnicas, que estimulan paso a paso los órganos y sentidos de los recién nacidos…
Pensando en el bienestar de los bebés, quisimos indagar un poco sobre esta antigua práctica, que merece la pena conocer y desarrollar en función de fortalecer el vínculo afectivo entre padres e hijos, regalándose, además, un momento íntimo para comprender las señales que envía cada pequeño. Para ello, conversamos con la psicóloga y doula María Gisela Terán, quien también cuenta con formación en el Centro de Estudios de Lactancia Materna (Celacma) como asesora y en la Asociación Internacional de Masaje Infantil, “es muy satisfactorio ver como una mamá llega llena de dudas sobre este mundo de la maternidad y poco a poco, vas viendo como la pareja va sintiéndose más cómoda y segura de lo que están viviendo”.
Es importante saber que “doula” es el nombre que se les da a las mujeres que acompañan a otras en su trayecto rumbo a la maternidad, su finalidad es prestar el apoyo necesario antes, durante y después del parto. María Gisela, tiene nueve años ejerciendo como Psico-doula y un año como instructora de masaje infantil, “es un trabajo que te enseña a ser humilde, te inspira a ayudar más a los padres; la retribución no es lo económico, sino esa confianza que generas en los padres para comunicarse con sus hijos, a través del tacto nutritivo sobre la piel, sentido más grande que tenemos”.
De esta manera, los invitamos a seguir leyendo más de lo que la doctora nos contó y a poner en práctica esta experiencia…
Háblenos un poco sobre los masajes infantiles…
Es una tradición muy antigua en la que, principalmente la mamá y ahora también el papá, masajean a su bebé, existen varias vertientes de masajes, pero el más conocido es el masaje hindú, netamente relajante. Ahora como masaje infantil, específico de la asociación internacional, nace gracias a la combinación del masaje relajante que le hacían las mujeres de la India a sus bebés, con el masaje sueco, reflexología y yoga; por lo que decimos que es una mezcla de esas tres técnicas. Partiendo de allí, Vimala McClure creó las líneas guías que le pueden permitir al bebé obtener relajación, motivación, estimulación de órganos internos y alivio.
¿Qué debemos conocer de cada una de estas técnicas?
-El masaje hindú, nos va a ayudar a que todos los músculos que el bebé pueda tener tenso se relajen, aunque parezca falso, ¡estos pequeños también se ponen tensos! Recordemos que ellos ahora deben adaptarse a un nuevo espacio totalmente distinto al que tenía durante el embarazo.
-El masaje sueco, activa todos los músculos, la circulación sanguínea y el sistema, inmunológico.
-Los movimientos de yoga, son de estiramiento, donde vamos fortaleciendo su cuerpo para lo que sería el gateo y posteriormente, el caminar.
-Los puntos de reflexología, se encuentra en la planta del pie y por medio de toques, estimulamos algunas de las funciones de los órganos principales.
Cuando hacemos contacto piel con piel generamos oxitocina y esta es fundamental para obtener bienestar emocional, así los bebes se siente más seguros y confiados.
¿Qué partes del cuerpo se trabajan con estos masajes?
¡Absolutamente todo! Realmente, lo ayudamos a integrarse y sentir todas las partes de su cuerpo, ellos no saben que son un individuo, se siguen sintiendo parte de mamá, entonces la principal ayuda es la vinculación afectiva y el apego seguro con mamá y papá, ¡porque papá también masajea!
Si le estamos dando un masaje al bebé y comienza a llorar ¿debemos parar?
Normalmente sí, el bebé te va dando las señales, él te va a decir cuando quiere un masajito o no y desde ese momento, independientemente de que sea tu mamá o tu papá “te respeto”, porque le doy prioridad a “tus necesidades”. El momento del masaje infantil debe ser un momento de tranquilidad, no se debe usar para calmarlo cuando está alterado, para eso, como madres, buscaremos otras herramientas que nos ayuden.
¿Cuáles son los beneficios psicológicos y físicos?
Físicos: Fortalecimiento del sistema inmunológico, ayuda del proceso digestivo, alivio de cólicos, gases y estreñimiento, refuerza el sistema respiratorio; el hecho de que toquen un punto de tu cuerpo, hace que todas tus neuronas trabajen juntas en una conexión neuronal que te avisa que, ese punto de tu cuerpo está siendo estimulado.
Psicológico: Fortalecimiento del apego; cuando a un bebé se le forma el apego seguro, es un bebé confiado, que sabe que su mamá está allí, eso que se decía antes sobre “dejarlo llorar” es falso, cuando se deja llorar siente abandono. Entonces, si yo como mamá le cubro sus necesidades, comenzando por el contacto, tendré a una persona segura, responsable solidaria y colaboradora.
¿Hay Beneficios del masaje para quien lo da?
Por supuesto, si estamos bien con nuestras emociones y nuestro mundo afectivo, obtendremos salud física; si yo como mamá le doy masajes a mi bebé y veo cambios positivos me sentiré más segura en mi rol, sentiré que conozco más las señales que él me da y sentiré tranquilidad y confianza en mí, lo que se traducirá en bienestar físico.
¿A todos los niños se les puede dar estos masajes?
Sí, a partir del primer mes hasta el año y posteriormente, cuando mamá sienta que con un masaje puede ayudarlo a sentirse mejor.
¿Con qué regularidad y en qué tipo de ambiente?
Diariamente, de hecho, invitamos a que primero den su masajito, luego un baño y por último la lactancia, de esa manera se ayudan mucho a relajarlo. ¡Es algo que irá fluyendo entre ambos! Ahora, en cuanto al ambiente, mientras más tranquilo sea, mucho mejor.
¿Es difícil aprender a hacerlos?
No, solo se necesita amor y eso es algo que todas las mamás ya lo tienen.
¿Se debe aplicar algún tipo de crema o aceite en las manos?
Preferiblemente sí, pero es algo que queda a recomendación de cada instructora y cada padre.
“Cuando conocemos, nos fortalecemos y no tenemos miedo a los cambios que vendrán”
“El leguaje y las señas que usa cada bebé es el principal libro que todo padre debe aprender a leer”
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