Mediante un comunicado público, el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP), exigió la liberación inmediata del periodista y activista social, Carlos Julio Rojas, quien fue privado de libertad este jueves en la ciudad de Caracas, mientras se encontraba participando en una protesta pacífica convocada por la Mesa de la Unidad Democrática.
Explican que además de periodista egresado de la Universidad Central de Venezuela (UCV) y trabajador del programa Radar de los Barrios, Rojas ha sido siempre un defensor de los derechos colectivos, así como un activista en favor de la Democracia.
«Desde su época universitaria, se insertó en el movimiento estudiantil, donde alzó su voz, junto a miles de estudiantes, contra el cierre de Radio Caracas Televisión. Al mismo tiempo, se dedicó al trabajo social en distintas comunidades caraqueñas, tarea que realizó hasta ayer, cuando fue apresado por organismos de seguridad del Estado mientras ejercía su legítimo derecho a la protesta», resalta el SNTP.
La instancia gremial condena la detención ilegal y arbitraria contra Rojas y exhorta a los organizaciones defensoras de los derechos humanos, tanto nacionales como internacionales, a emplazar al Gobierno venezolano para que deje en libertad al comunicador y cese en su empeño por generar miedo en quienes son críticos, cuestionan su gestión y se asocian para generar cambios en el marco de la Constitución de la República.
«La detención contra Rojas se enmarca claramente en la intención oficialista de inhibir el debate plural, ocasionar autocensura y sembrar el pánico entre los que se oponen a las políticas gubernamentales», precisa el comunicado.
El SNTP ve con mucha alarma que, apenas a horas de la detención de Rojas, el ministro de Interior, Justicia y Paz, Néstor Reverol, emitiera airadas y apresuradas acusaciones contra el periodista, dejando ver la siembra de supuestos elementos conspirativos y, seguro, la intención de someterlo a la justicia militar.
«Le exigimos al ministro que se limite al cumplimiento de sus responsabilidades, en especial las relacionadas con el combate de la delincuencia, los asesinatos y el tráfico de drogas, y que respete el Estado de Derecho. Reverol no es ni juez ni fiscal, con lo cual no son conclusivas sus aseveraciones y entorpecen cualquier investigación que debe darse de manera libre, independiente y en el estricto marco de la ley. Además, con sus afirmaciones públicas, promueve el descrédito de este periodista que con transparencia ha combatido las injusticias en distintas circunstancias», finaliza el comunicado.
