Los Guaros de Lara, adelante 3-2 en la serie final de la Liga Profesional de Baloncesto (LPB) 2017 contra los Marinos de Anzoátegui, irán esta noche a las 7.30, en el Domo Bolivariano de Barquisimeto, por la victoria que les falta para ser campeones por primera vez en su historia como franquicia y así quedarse con el trofeo que no tienen aún en su repisa, tras haber sido primero monarcas a nivel internacional.
Tras dos coronas en la Liga de las Américas FIBA (2016 y 2017) y una en la Copa Intercontinental FIBA (2016), están a solo un paso de saldar las cuentas en casa y lo hacen tras haber perdido la oportunidad de rematar la faena en el gimnasio Luis Ramos de Puerto La Cruz, toda vez que el acorazado oriental se mantuvo con vida, al dominar el quinto juego el pasado domingo 2 con pizarra de 91-80.
El quinteto del argentino Guillermo Vecchio ha jugado para 5-1 en casa en lo que va de postemporada y en el inicio de esta serie final, la cuarta de su historia (2005, 2006, 2015 y 2017) y la tercera contra los navales (perdieron las dos anteriores en 2005 y 2015), los crepusculares ganaron por 96-94 y 99-85.
En su periplo a Puerto La Cruz, los orientales ganaron el tercer partido por 92-87, Guaros se vengó en el cuarto por 89-74 al aprovechar la ausencia por lesión de Gregory Vargas y la salida durante la segunda mitad de Miguel Marriaga y, aunque al quinto juego los Marinos llegaban sin su coach Tony Ruiz y con Manuel Berroterán como interino, recuperaron a Vargas a tiempo para imponerse, 91-80.
Sin hacer su mejor juego en ataque, en especial en una segunda mitad en la que solo encestaron un triple y con el lastre de haber permitido hasta 50 puntos en la pintura, Guaros tratará de hacer respetar su casa y celebrar ante su gente. Tiene la ventaja de contar con hasta dos oportunidades para hacerlo pero intentará que no se haga necesario un séptimo choque.
El departamento de prensa del quinteto destacó que hasta cinco jugadores larenses promedian 10 o más puntos, a saber, Nate Robinson (16.0 y 4.4 asistencias), Lazar Hayward (14.8 y 6.0 rebotes), Heissler Guillent (11.2 y 5.2 asistencias), José Vargas (10.8 y 4.6 rebotes) y el pívot Gregory Echenique (10.2 y 7.2 rebotes).
A eso se suma la labor desde el perímetro de Luis Bethelmy y el rol de sexto hombre ideal de Néstor Colmenares, amen de los puntos desde el banco del escolta estadounidense Zach Graham y la intensidad en defensa y amenaza desde la larga distancia que ha representado Elvis Báez cuando se le ha requerido.
Impedir segundas oportunidades, contener la producción del pívot Chris Massie y complicarle la construcción del juego a Gregory Vargas y Jesús “Zancudo” Centeno para que tiradores como Rafael “Chamo” Pérez, el panameño Michael Hicks o Leon Rodgers no puedan hacer daño, forma parte de las misiones a cumplir ante un rival que también ha contado con la mano caliente de Michael Carrera, pese a su corta edad.
Treinta y cuatro años después de las Panteras de 1983, Lara está a 40 minutos de otro cetro en el principal circuito del baloncesto nacional.
