De recorrer las canchas de la segunda división nacional a ser hoy el flamante campeón del torneo Apertura. Así es el “cuento de hadas” del Monagas SC, club que rompió los pronósticos al vencer al Caracas FC, con once títulos a cuestas y la dirección técnica de Noel Sanvicente, en la discusión del primer título de la temporada y el boleto número uno a la Copa Libertadores de 2018.
La oncena de Maturín, que acudía a un duelo definitorio con un grande del país, siempre favorito por más que no tenga las figuras de antes, dispuso de su rival con un global de 2-2, en una final diseñada a partidos de ida y vuelta, pero prevaleció gracias al gol anotado por el atacante Anthony Blondell en el segundo careo de la serie, 2-1 a favor del Caracas, desarrollado ante unos 20 mil aficionados en el estadio Olímpico de la capital.
Se dio así la coronación de un club que sacó provecho de un proyecto a largo plazo, sin chequera poderosa como otros elencos del circuito, pero sí muchos “obreros” y un Luis “Cariaco” González en su mejor momento deportivo, suficiente para llevarse por delante todo lo que encontró en el camino, contrincantes de postín, porque antes de batir al Caracas en la final, sacó de carrera nada menos que al Zamora, ganador de la estrella en la pasada campaña.
Ahora todo es alegría para un feudo futbolero que festeja su primer título después de 30 años y lo hace poco después del “calvario” que significó perder la categoría por allá en 2013, incluso con amenazas de desaparición del equipo, producto de la crisis económica que entonces atravesaba. Volvió a la división de honor enero de 2016, tras ganar el hexagonal final de la segunda división, de la mano de Edwin Quilagury, y poco después, con la inyección de dinero proveniente del capital privado, inició una etapa exitosa, con el nombramiento de Jhonny Ferreira, para lograr el que ahora aparece como el logro más trascendental de aquella institución.
Hay, también, una sensación de revancha, puesto que el Monagas parecía ir por cosas grandes en el semestre anterior -torneo Clausura de la temporada 2016- pero se quedó corto en su propósito, al ser eliminado por el Deportivo Táchira en cuartos de final, después de una primera fase en la que cerró tercero en la clasificación.
Campeón con todos los honores. A todas luces, fue el equipo que terminó jugando mejor, desplegando una idea clara en el campo de juego, agradable para la tribuna, siempre con vocación ofensiva, y se quedó con un premio justo.