Hace unos dos meses, un numeroso grupo de familias residentes en la calle 60 con carreras 12 y 13 y sectores cercanos, cerraron la vía principal desesperadas por el largo tiempo que llevaban esperando el suministro del gas doméstico.
En esa ocasión, cuando les solucionaron el problema, les prometieron regularizar la distribución, pero hasta ayer llevaban otros dos meses sin el combustible
“El camión llega cerca, pero a nosotros no nos venden las bombonas porque y que somos de la oposición, no tenemos el Carnet de la Patria ni el del PSUV y tampoco tenemos consejo comunal que nos represente”, afirmó Carmen Medina, una vecina.
Los habitantes del sector, en su mayoría amas de casa, este miércoles, con los cilindros vacíos, se colocaron en la calle 60 en las esquinas de las calles 12 y 13 para protestar nuevamente por la falta del GLP.
María Álvarez, vocera del barrio, calculó en unas 500 la cantidad de hogares que están padeciendo allí las consecuencias de la pésima distribución de ese elemento, necesario en toda cocina.
Considera injusto que lleguen camiones a calles cercanas con las bombonas llenas y a ellos no les vendan por no identificarse con el gobierno.
María Pérez, por su parte, denunció que algunos distribuidores, luego de aclararles no pertenecer a la zona, les venden los cilindros pequeños a 5 mil bolívares, lo que considera una estafa que debe ser investigada y sancionada por los encargados de Gas Comunal en Lara.
Durante toda la mañana de este miércoles, mujeres y hombres permanecieron en el medio de la vía, esperando alguna respuesta positiva al problema, hasta que otro grupo colocó y prendió fuego a varios cauchos viejos en la 11, en protesta al gobierno.
Esta segunda manifestación alejó las esperanzas de que les enviaran un camión con los cilindros llenos, aunque la mayoría decidió continuar con su manifestación al margen de la otra.
Pero en la calle 60 con carreras 12 y 13 y sectores inmediatos no sólo padecen la falta de gas y de consejo comunal, pues tampoco saben lo que es una bolsa o caja del CLAP, y para comprar pan deben madrugar, tomar un número y esperar hasta la tarde en una cola, bajo el Sol o la lluvia, dependiendo del estado del tiempo.