Ni el hecho de que al lado exista una iglesia católica a la que asisten miles de feligreses, un liceo, e incluso la delegación del Consejo Nacional Electoral, ha llevado a las autoridades municipales a dar el correspondiente mantenimiento a la plaza de la Urbanización del Este.
De eso se percatan a diario los vecinos que, preocupados, han insistido ante la alcaldía de Iribarren para que “le hagan un cariñito”.
También el diputado Filiberto Peña ha abogado por el emblemático lugar, pero nada le hacen, por lo que cada día está más deteriorada, comenzando por la maleza que lo cubre todo, e incluso en algunos sectores hasta las sillas allí colocadas para que las personas se sienten a disfrutar de la sombra de los árboles que aún subsisten.
Allí, hasta hace algunos años, existió una fuente que era el mayor atractivo de los niños, también de muchos adultos, pero, aparentemente por falta de seguridad, se robaron la bomba y demás equipos y la dejaron abandonada, existiendo ahora, solamente, un pozo de agua con muy mal olor y criadero de zancudos y otros insectos.
“Esta plaza era muy bonita antes; yo recuerdo que cuando salíamos de la misa aquí en la iglesia Santa Teresita nos sentábamos un rato en la sombra de los árboles a conversar; eso no se puede hacer ahora porque todo está abandonado, da lástima”, expresó Cecilia, una señora vecina de la Urbanización del Este.
Pero si durante el día no es nada atractivo acudir a ese espacio, de noche es peor porque carece por completo de alumbrado debido a que las lámparas, o se quemaron por los años en uso o las destruyeron los antisociales para tener un sitio oscuro donde esconderse.
En el ala norte de la plaza existe un local destinado a reuniones de los vecinos, pero tampoco ha escapado a la acción de los delincuentes que desmantelaron lo poco que allí se guardaba.
Milagrosamente, la cancha de baloncesto, que aún es utilizada por algunos jóvenes, se ha conservado a medias, aunque la cerca protectora ha sido derribada en algunos tramos, lo que reduce la seguridad a los deportistas.
Hace algunos meses colocaron unos equipos de distracción para los niños, pero si no se les da algo de protección, en cualquier momento le pasará lo mismo de la fuente, la cancha de baloncesto, el local de la oficina y las máquinas para ejercicios que sobreviven a la acción hamponil.
En general, la plaza de la Urbanización del Este necesita ser recuperada para ponerla al servicio pleno de vecinos y estudiantes antes de que se convierta en un sitio de reunión sólo de antisociales.