Luego de 12 días y más de 380 kilómetros recorridos, los estudiantes que partieron del estado Lara arribaron a la ciudad de Caracas este martes para demostrar, una vez más, que están dispuestos a defender la democracia y la Constitución de la República.
Ni la lluvia, ni las requisas de los funcionarios de seguridad del Estado impidieron que 31 muchachos que emprendieron desde el Occidente mostraran de qué están hechos y cuán capaces son de defender sus ideales de libertad y progreso. A las 3 de la tarde fueron recibidos por la dirigencia de la Universidad Central de Venezuela (UCV), quien los tildó de valientes y libertadores por tan “hermosa gesta histórica”.
José Miguel Silva Ocanto, estudiante de la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (UCLA), explicó a EL IMPULSO que, con la ayuda de compañeros de Carabobo y Aragua, buscan alcanzar tres objetivos: unificar el movimiento estudiantil, demostrar al pueblo que el camino hacia la libertad está en la calle y ser la voz de los perseguidos por el Gobierno.
Narró que durante estos días se llenaron de energía, gracias a los aplausos y a las bendiciones que impartían los ciudadanos a su llegada. “Cuando nos reprimieron en el Túnel de La Cabrera, esos guardias demostraron que tienen miedo y esa es razón para continuar en las calles de manera pacífica. Nuestra convicción está por encima del temor que ellos sientan”, dijo.
Por su parte, Wilmer Torres, recordó que una compañera fue impactada por una bomba lacrimógena que rebotó en el pavimento cuando se encontraban por el Túnel de La Cabrera, que une a los estados Carabobo y Aragua. Sin embargo, no se amilanaron y continuaron el camino que suponía llegar hasta la capital de la República. Agradeció a la sociedad civil que colaboró con alimentos e insumos y aseguró que no es momento para abandonar las calles, sino para defender lo que el Gobierno se “robó”.
A la Plaza del Rectorado de la UCV se aproximaron sus autoridades: Cecilia García Arocha y Amalio Belmonte, quienes con aplausos expresaron su admiración por la gallardía de estos jóvenes que enarbolan la bandera del futuro.
García Arocha indicó que mientras esté al frente de la comunidad universitaria velará por el cumplimiento de la democracia y los valores, y además por la posibilidad de que los jóvenes tengan las mismas oportunidades de las generaciones anteriores.
“Al creer en la democracia, en los valores y en la paz, obligan a comprometernos a continuar en la lucha por un país libre, plural y por una universidad siempre autónoma. Esta es su casa y aquí tendrán un espacio para recrearse y debatir ideas. Jamás se les va a reprimir. Y tampoco nos vamos a ir ni del país, ni de la universidad, porque son nuestros”, sentenció.
Labor desinteresada
Estudiantes de Medicina y de Enfermería de la UCLA también acompañaron la iniciativa, y aunque no fueron reprimidos directamente, lamentaron el hecho por cuanto se trataba de una caminata pacífica y “constitucional”.
Felipe Zambrano, miembro de Primeros Auxilios UCLA, contó a EL IMPULSO que la energía de los muchachos era impresionante, a pesar de los ataques. “Cada día despertaban con más ganas de luchar y eso es admirable. Ellos contribuyen a un mejor país, así como nosotros, y de forma desinteresada”.
