En la zona norte los transportistas decidieron afianzar la protesta que el gremio ha desarrollado en todo el estado Lara desde el pasado lunes. Tomaron una serie de medidas que a su juicio presionaría al Gobierno nacional a darles respuestas y soluciones de cada una de las carencias que el sector atraviesa y que aseguran están cansados de denunciarlas.
Desde el día martes las principales vías de la zona norte han sido obstaculizadas. Los conductores decidieron hacerse notar y cerraron el paso en el sector El Pegón, El Eneal y la Vía a Aroa. A lo largo de toda esta semana la protesta se repitió y para este jueves el panorama no fue distinto. Desde las 3:30 de la mañana los buseteros se trasladaron a estas arterias viales y con sus autobuses bloquearon por completo el paso vehicular.
Francisco Palacio, presidente de Expresos San Juan, una de las líneas que se encontraba en protesta y cubre la ruta Barquisimeto- Duaca – Aroa, recordó que su lucha exige el pago de los depósitos del subsidio estudiantil, y aunque ya haya sido pagado un mes, los mismos se deberían efectuar continuamente en su debido momento. Igualmente con estas acciones exigen la distribución de repuestos por parte de la proveeduría.
Palacio destacó que tienen un motivo más por el cual protestar. La Federación ha visto con indignación cómo los conductores denominados piratas han aprovechado de hacer “su abasto” ocupando sus rutas de trabajo y cobrando lo que les plazca. El precio de un pasaje Barquisimeto – Duaca es cobrado en 800 bolívares y los autobuses piratas les piden hasta 1.000 a los pasajeros. Reiteró que no es algo nuevo que solo se ve en tiempos de paro, puesto que existe un terminal paralelo en la avenida Vargas con Andrés Bello, que desde siempre se ha dedicado a ocupar su ruta a precios exuberantes. “No hay autoridad que responda o haga algo al respecto. Trancando estas vías es una manera de obligarlos a que ellos también paren sus funciones. Lo único que dejamos pasar fueron camiones que portaban alimentos, gasolina, gas y cualquier emergencia”, expresó.
Igualmente destacó que en ningún momento se presentó alguna autoridad para discutir y tratar de llegar a un acuerdo con los 140 transportistas que laboran en la zona norte.
A los pasajeros no les quedaba de otra que bajarse de las unidades que habían conseguido para trasladarse y caminar hacia su destino. En las diferentes trancas había una fuerte presencia de mototaxistas quienes ofrecían sus servicio a los usuarios desesperados por llegar a su lugar de trabajo, estudio o simplemente trasladarse. En 1.000 bolívares era cobrada la carrera desde la intercomunal hacia Tamaca.