Recomendaciones de cómo buscar caminos de paz en momentos convulsionados se desgranaron en el foro “Barquisimeto ciudad de paz” resuelto en el Colegio de Abogados, la tarde de este jueves, y orientado por Rosario Anzola, Marisela Gonzalo, Alexis Guerra y Rafael Uzcátegui, coordinador general de la ONG Provea.
Impera por estos días “reconstruir la paz desde la ciudadanía, desde la familia, pero no teóricamente sino a través del respeto al otro y del reconocimiento del otro, que no es más que la empatía”, definió Anzola, representante del Consejo Consultivo para la Ciudad.
Usó como ejemplos del triunfo del pacifismo a Gandhi y Martin Luther King. La historia, recordó, prueba cómo los movimientos deslastrados de la violencia tienen mayor eficiencia.
Sobre ese rumbo trabajan desde el Consejo de Estado por la Paz y la Justicia (CEPAZ) Lara, el Consejo Consultivo para la Ciudad y las universidades. Tejer una red que “permee los valores de paz en la ciudadanía” es la meta. Adicionalmente, informó Anzola, trabajan en hacer talleres en las comunidades y en las instituciones educativas para los padres con el fin de orientarlos cómo manejar situaciones de alteración, siempre con la paz como arma.
En esa creación de una atmósfera pacífica, aconsejó Anzola, la conciencia, el reconocimiento del otro, el respeto, la tolerancia y eliminar el discurso bélico son parte de la fórmula. Las diferencias no pueden ser motivo para ver al otro como enemigo, aclaró.
Para quien ataca o al organismo de seguridad que reprime el antídoto es “invitarlo a que tome conciencia” e insistir en la protesta pacífica. “Este ojo por ojo y diente por diente lo que nos convierte es en cegatos y desdentados, pero jamás en una sociedad constructiva”, tajó.
En la visión de Guerra, profesor de la UCLA en la carrera Desarrollo Humano, los ciudadanos deben prepararse para la paz y no para la guerra y eso se puede lograr en parte mediante la educación: “Para mí la clave está en educar para la paz y eso tiene que comenzar desde la escuela, tiene que permear y llegar a todos porque si no llegaremos a lo que estamos viendo, al borde una guerra, matándonos entre nosotros mismos”.