Tras 72 horas de paro por parte de los miembros de la Federación Nacional de Transporte de Lara, aún el gremio no llega a un acuerdo con el Ministerio de Transporte, lo suficientemente beneficioso para restablecer sus actividades. A un cuarto día se extiende la paralización del transporte, este jueves.
El miércoles los conductores ejercieron presión con el cierre de la vía principal de Duaca. La arteria vial fue obstaculizada con las unidades de transporte. Igualmente, las entradas en el Terminal de Pasajeros de Barquisimeto permanecieron cerradas con los autobuses que allí laboran, para impedir que los conductores no adscritos a la Federación ocuparan sus lugares de trabajo y no hubiese ningún flujo de usuarios en las inmediaciones.
Sin embargo, algunos conductores hicieron caso omiso al paro y estas advertencias. En los alrededores del terminal y en algunas paradas de autobuses ubicadas en la avenida Venezuela y la carrera 18, se presume que un grupo de transportistas bajaron a la fuerza a los pasajeros que se trasladaban en las unidades piratas, lo que originó un gran caos en el centro de la ciudad. Al momento que los ciudadanos fueron obligados a bajarse de los autobuses, este grupo corría en búsqueda de intervenir la próxima unidad, quienes se encontraban el sitio temían al ver un gran número de personas, gritos y algunos manotazos; por lo que se creó el rumor de que un grupo de “vándalos” andaba por el centro saqueando negocios. Los comerciantes alertas bajaron su santamarías, y de esa manera una parte del centro suspendió sus actividades. A pesar de que el supuesto saqueo se originó en la calle 42, el cotilleo se extendió hasta el conocido Mercado Bella Vista, que también cerró sus puertas. Funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana cerraron el paso a la calle 46 para evitar cualquier situación violenta.
Mientras los buseteros mantenían secuestradas algunas unidades que sus dueños deseaban poner a trabajar.
El director del Terminal, Luis Valencia recordó que el Ministerio tan solo ofreció 400 cauchos a los transportistas, cuando el reclamo nacional es de 350.000 unidades. Igualmente, vio con preocupación que no haya realmente un pronunciamiento oficial de parte de la proveeduría, más allá del discurso “evasivo político” que usa el presidente de la proveeduría, Nelson Torcate, al decir que “la protesta es netamente de transportistas de la derecha”.
“Los que deben dar respuesta son ellos. Los subsidios del pasaje estudiantil es responsabilidad de Fontur, es decir del Gobierno central y la proveeduría es un mecanismo que crea el Gobierno para atender al sector transporte y aquí en Lara solo cumple con el 10 % de la demanda, es decir que hay un vacío que pareciera que lo hacen con la intención de sustituir al transporte público; pero ni siquiera Transbarca se da abasto, está demostrado que les faltan más de 200 unidades para cumplir con su operatividad”, expresó Valencia.
Destacó que 150.000 personas se han visto afectadas en estos tres días por el paro de las unidades de transporte. Igualmente hizo hincapié en que el 85 % del comercio dentro del terminal se encuentra cerrado por falta de clientes.
En tanto, el secretario general del Sindicato Automotor en Lara, Giovanni Peroza destacó que se mantendrán en su lucha hasta que consigan una respuesta por parte del Gobierno que cumpla con sus peticiones: pago del subsidio estudiantil, colocación de las máquinas para el uso de la Tarjeta Inteligente, equipamiento de insumos y seguridad para los transportistas y usuarios.
A pesar de que se extendió el paro de transporte, el día de hoy se oficializa el aumento del pasaje.
La tarifa urbana será cobrada en 200 bolívares los días de semanas y 250 los fines de semana y después de las 7:00 de la noche. Incremento autorizado por el AMTT.
