La carrera deportiva de la larense Antonella Creazzola se ha caracterizado en los últimos meses por tomar una curva ascendente que le permitió sobrepasar la marca mínima (60 metros pedían e hizo 61.02) para asistir al mundial sub18 de Kenia en julio, también rompió su propio récord nacional en lanzamiento de martillo (63.62) y va por más en el clasificatorio a los Juegos Deportivos Nacionales Juveniles en Barinas de este viernes en el que tiene como meta llegar a los 65 metros.
“Me siento muy bien en lo físico y técnico, porque estoy trabajando mucho para afrontar la competencia mundial que es mi objetivo principal. Si quiero trascender en esa justa debo estar entre los 66 y 67 metros, por eso en el clasificatorio sería positivo estar en los 65, creo que puedo lograrlo”, resaltó Creazzola.
El secreto del avance vertiginoso en su carrera, según la lanzadora, se debe a tener mayor velocidad y ritmo en sus ejecuciones, sumado a mejorar la confianza, tres factores que siempre repasa con su entrenador Miguel Escobar.
Junto a Creazzola, irá al mundial la barquisimetana María Parra en salto largo, ambas baluartes importantes a nivel local de cara a los Juegos Nacionales de agosto.
Pulverizando récords
En lo que va de año la criolla ha hecho añicos sus propias marcas de manera notable, pasó de unos sobrios 55 metros en enero, a un 59.02 en marzo, a un 61.02 en abril y la semana pasada en el memorial Máximo Viloria alcanzó el notable 63.62.
La novel promesa nacional tiene como referente a su coterránea y finalista olímpica de Rio 2016, Rosa Rodríguez, quien se encuentra en Eslovenia preparándose al mundial adulto de Londres.