El presidente Donald Trump se defendió el lunes de acusaciones de que delató ante diplomáticos rusos a una fuente israelí de información secreta y enfatizó, al lado del primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, que en su reunión con los rusos jamás mencionó la palabra «Israel».
«En ningún momento pronuncié la palabra ni el nombre Israel», dijo Trump al concluir una conferencia de prensa con Netanyahu, en referencia al día en que se reunió en la Casa Blanca con el canciller de Rusia y con el embajador ruso en Estados Unidos. «Así que ustedes se han equivocado de nuevo», dijo el mandatario.
Han surgido numerosas versiones, con base en fuentes anónimas, de que Trump compartió información confidencial con los diplomáticos rusos sobre la amenaza que presenta el grupo Estado Islámico y las fuentes han dicho que esa información le fue entregada a Estados Unidos por la agencia secreta israelí. En ninguno de los reportes se dice que Trump mencionó específicamente a Israel en su reunión con los rusos.
Netanyahu, por su parte, dijo que la cooperación entre Estados Unidos e Israel en el área de inteligencia es «magnífica», en un intento de minimizar las inquietudes de que la revelación de Trump violó el acuerdo entre los dos países para compartir información.
Horas antes, Trump había iniciado su primera visita a Israel diciendo que cada vez observa más que las naciones musulmanas comparten una «causa común» con Israel en su determinación de contrarrestar la amenaza que representa Irán.
El mandatario estadounidense llegó procedente de Arabia Saudí, donde disfrutó de una espléndida bienvenida ofrecida por la familia real. Trump manifestó su esperanza en la cooperación entre los aliados de Estados Unidos en Oriente Medio.
La segunda escala en su viaje de nueve días busca medir las aguas por revivir el proceso de paz entre israelíes y palestinos.
Trump, quien previamente indicó que sería más fácil de lo anticipado resolver el conflicto que ha irritado a sus antecesores durante décadas, dijo que las condiciones eran correctas tanto en Israel como en el mundo árabe para alcanzar lo que él llama «el acuerdo definitivo».
«Tenemos ante nosotros una oportunidad poco común de aportar seguridad y estabilidad y paz a esta región y a sus habitantes», dijo Trump al llegar a Tel Aviv.