“Él no tenía problemas con nadie, no tenía registros policiales. Era un trabajador, padre de familia, y habrán llegado por equivocación a matarlo”, fueron las palabras que profirió a EL IMPULSO, Alexis Carballo, padre de un hombre abatido por funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) del estado Lara, llamado Elvis Alexis Carballo Minervini, de 27 años de edad.
El hecho se registró, como a las 10:30 de la noche de este viernes, en el sector Lomas de Tabure II, municipio Palavecino del estado Lara.
Según explicó el padre del hoy difunto, Elvis Alexis se encontraba durmiendo en su hogar junto a su esposa y bebé de un año y medio de edad.
De repente, contó, llegaron los funcionarios policiales y acordonaron el rancho, para después ingresar a la vivienda y sacar de la misma al niño y a la mujer.
Luego lo habrían sacado sin vida de la morada.
“Dicen que fue un enfrentamiento cuando nunca llegó a manipular un arma, no tiene conocimiento de eso”, afirmó Carballo, a pesar que la versión oficial reza que Elvis Alexis estaba solicitado por la justicia venezolana.
Conocidos aseveraron que el supuesto antisocial era trabajador contratado de la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (Ucla), en donde tenía tres meses como jardinero.
Apuntaron que estudió Electromecánica en el Instituto Nacional de Capacitación y Educación Socialista (Inces) e hizo pasantías en el central azucarero Río Turbio. Era jugador ocasional de softball.
Carballo padre relató que, lejos de ser un hampón, su hijo había sido víctima de la delincuencia que tiene azotada a Venezuela en distintas oportunidades.
En una de ellas lo despojaron de su cédula de identidad y otros documentos personales, por lo que habrían podido vincularlo así con cualquier crimen.
“En dos oportunidades lo robaron y lo dejaron botado. En la comisaría de Cabudare consta que le robaron la cédula”, manifestó.
Era el mayor de cinco hermanos y cumplía 28 años el próximo martes.
“Yo le pregunté a los ‘ptj’ que por qué lo habían hecho y ellos me dijeron que estaban seguros que mi hijo había matado a alguien. Eso nunca, jamás. Queremos que se limpie el nombre de mi hijo porque su vida no me la van a devolver”.
La Fiscalía 21 del Ministerio Público estaría encargada del caso.