Criminólogos sostienen que la mujer venezolana ha ganado terreno en los hechos delictivos y hoy ejerce un rol más protagonista en el mundo criminal.
Para comprobar tal hipótesis puede ser utilizado el caso que ameritó la intervención del Conas-Lara, en el que una mujer de 43 años de edad y una joven fueron las autoras materiales de un secuestro exprés perpetrado a una taxista, al oeste de Barquisimeto, a quien, después de dejarla en libertad, le exigieron 1 millón 500 mil bolívares para devolverle su Spark del año 2008 y único sustento de trabajo.
Resulta que Evelín Pastora Peraza López (43) y Joemar Kariángela Borges González, de 20 años de edad, solicitaron los servicios de la choferesa en la carrera 19 con calle 45 de Barquisimeto; iban hacia Pueblo Nuevo, zona oeste.
Antes de llegar a la cooperativa Cecocesola del sector, Joemar Kariángela sacó un arma de fuego y obligó a la taxista a orillar el carro, justo en un lugar donde dos hombres aguardaban para hacerse con el vehículo. Se montaron en él y huyeron, dejando a la propietaria “botada”.
El punto pautado para el cobro del rescate fue la panadería Pan de Azúcar de San Jacinto.
La entrega controlada del dinero se efectuó este sábado, con la intervención del organismo militar antiextorsión, y en la misma fue atrapada Jesimar Pastora Querales Torres, de 32 años de edad, quien esperaba el dinero.
Rastrearon el coche hasta la propiedad de Víctor Hugo Paiva Chaurio, de 63 años de edad, quien resultó aprehendido en el acto, junto a Yolbert Enrique Escalona Galina, de 29 años.
A ellos les decomisaron cuatro celulares como evidencia.
En la casa en la que sorprendieron a estos hombres, además del Spark, fue recuperado un Fiat Siena, de color azul y placas KAE441, reportado como robado este 18 de mayo.
Según una fuente oficial, esta banda está nombrada en al menos siete casos recientes, por lo que continúa el trabajo de investigación para dar con sus demás integrantes.