Un terrorífico accidente se suscitó la mañana de este domingo, al oeste de Barquisimeto, cuando una buseta se llevó por delante a Edgar Javier Pérez García, de 62 años de edad, para después arrástralo como seis metros sobre el asfalto, pasarle por encima, y detener su marcha al estrellarse con una robusta palma que terminó derribada sobre la acera.
El sexagenario murió al instante. El suceso se presentó como a las 11:30 a.m., en la avenida Pedro León Torres, frente a las residencias Sotavento, sentido sur-norte.
“No me dio tiempo de esquivarlo. Cuando lo intenté, ya lo tenía encima”, declaró a EL IMPULSO el conductor del autobús, quien prefirió mantenerse en el anonimato.
En el vehículo solo iban el chofer y su hijo pequeño, quien no hacía más que preguntar si se llevarían detenido a su papá.
Cuentan testigos del hecho que el occiso, a quien conocen en la zona como Tripa, no miró para los lados al intentar cruzar la calle y, además, habría tenido problemas al apoyar la muleta con la que se ayuda para caminar. Había salido de Locatel antes de ser embestido.
Aunque el conductor del vehículo asegura que iba a 30 kilómetros por hora, sobre el canal izquierdo, otros comentaron que iba un poco más rápido y por ende no pudo reaccionar bien.
El profesional del volante confesó que partió del Terminal de Pasajeros de Barquisimeto y se dirigía a Makro a recoger pasajeros, puesto que pretendía trabajar un rato para hacer dinero y sacar a pasear a su familia más tarde. Entre los nervios y el pesar, caminaba de un lado a otro y abrazaba a su hijo, mientras explicaba lo sucedido.
“Ese debe ser Tripa, no ves que tiene la muleta. Ese estaba ahorita hablando conmigo chamo”, dijo un joven cuando se reconoció el cadáver. También contó que el difunto ya había sufrido como cuatro siniestros similares y por eso caminaba con dificultad. Cuidaba carros y pedía dinero a las afueras de Locatel.
El fallecido vivía en el sector 4 de la Ruezga Norte, sufría de rigidez muscular y tenía varias hernias.