¿Sabías que a través de nuestra firma pueden descubrir nuestra personalidad? Se trata de la grafología, una técnica encargada de analizar los rasgos de nuestra personalidad a través de la escritura.
La firma es una marca personal, la cual normalmente utilizamos para identificar documentos y trámites; pero también, puede reflejar nuestros deseos más íntimos y el potencial de nuestra personalidad. Mediante la grafología, se puede determinar ciertos aspectos psicológicos, como los rasgos generales del carácter, tipo de inteligencia, aptitudes profesionales y laborales. Para saber que dice nuestra firma, debemos tomar en cuenta una serie de parámetros, que te presentamos a continuación
Velocidad
Cuando una persona firma a una velocidad rápida, puede significar que tiende a ser desesperada y con ganas de terminar las cosas de manera rápida. Por el contrario, cuando el individuo realiza su firma con velocidad lenta, puede connotar tranquilidad y reflexión.
Presión en el papel
La fuerza que se realiza en una hoja podría simbolizar el grado de salud y el nivel energético, es por ello, que cuando la escritura es tensa, es sinónimo de firmeza de carácter, tanto en los deseos como en las opiniones. En cambio, cuando la escritura es floja, indica carencia de fuerza interior para enfrentarse a los obstáculos.
Inclinación
Esta determina el grado de apertura emocional de una persona y como se relaciona con las demás. La escritura inclinada hacia la derecha, representa a una persona que pierde fácilmente los nervios, celosas y tiene una fuerte necesidad de acercarse a los demás. En el caso de las firmas inclinadas a la izquierda, son personas que ejercen una fuerte vigilancia sobre sí mismas.
Tamaño
Este suele medirse en los óvalos de las letras “o” y “a”, cuando un óvalo cuenta con un tamaño menor a los 2 mm, corresponde a una persona con temperamento nervioso, que suele ser dinámica, orientada a retos y decisiones. Cuando el tamaño es mayor a los 4 mm, reflejan comportamientos egocentristas, es decir, es un persona que le gusta darse a notar.
Dirección
Las firmas que son crecientes son relacionadas con personas optimistas, con sentimientos de superación y deseos de cambio. Las descendentes tienden a ser personas depresivas. En el caso de las cóncavas, demuestra que estas personas tienen capacidad de superación. Y las convexas se caracterizan por ser ingeniosa, simpáticas y, en ocasiones, suelen ser personas que presentan algún tiempo de desánimo.
Legibilidad
Las firmas legibles, representan a una persona que tiene objetivos claro, comportamiento responsable y autoestima alta. Las firmas semilegibles, normalmente caracterizan a personas que evaden las responsabilidades, son impacientes y ansiosas. Y las ilegibles, suelen ser individuos confusos en sus actos, tienden a presentar dificultad para admitir la autoridad. Son evasivas y con problemas de personalidad.
Separación
Esto nos permite conocer el grado de constancia y regularidad de un individuo en su actividad y su vida afectiva. Cuando es pegada, describe a una persona con buena capacidad lógica y que no abandona lo que hace hasta llegar a la meta. Al contrario, una firma desligada, muestra la capacidad que tiene una persona de apreciar los detalles, de ver cada parte por separado, pero también pone de manifiesto los problemas de integración con el entorno. Las agrupadas, reflejan una persona que conjuga la lógica e intuición y tiene equilibrio entre el mundo interno y el exterior.
Ubicación
En el lugar que se sitúa la firma con relación a texto, puede indicar el grado de dependencia o capacidad de autonomía entre la vida personal y social. Las firmas que rozan el texto, significa que predominan los impulsos sobre las reflexiones, hay demasiada confianza y vulnerabilidad. Las que se encuentran cerca del texto, expresan sociabilidad y una persona de fácil adaptación. Y las que están alejadas, son personas introvertidas que evitan la comunicación en su ambiente social o profesional.
Orden
Cuando una firma es cuidada, significa que se tiene claridad mental y manifiesta desinterés en lo que hace la sociedad; en cambio las descuidadas, suelen tener confusión de ideas, pensamientos con falta de orden y les importa más lo que piensan los demás; tratan de cubrir su intimidad con el fin de que no se revelen sus defectos, complejos y ambiciones.