El base Amos Acosta agradeció la confianza recibida por el cuerpo técnico de Guaros de Lara (22-12) para cerrar como uno de los armadores en el último cuarto de la victoria ante Panteras de Miranda (11-21), 91-77 en Parque Miranda, encuentro que a su juicio “había que salir a buscar para no darle hándicap a un equipo que está buscando la clasificación”.
El capitalino considera que el coach argentino Guillermo Vecchio es “de esos entrenadores que piensan que esto no se juega con nombres sino con hombres y que quien le esté dando resultados en la cancha es el que va a jugar con él. Nos ha dado la oportunidad a (José) Ascanio, a (Yohanner) Sifontes, a Yoeser (Valera) y a mí de mostrar nuestro talento al ponernos a jugar, que es lo que queremos. Agradecemos la confianza que nos ha dado”.
Acosta terminó el compromiso con dos puntos y un par de rebotes en 13 minutos y 14 segundos en cancha y tuvo oportunidad de enfrentar a su hermano Abrouse. “Estoy agradecido con Dios por la oportunidad que me da de jugar este lindo deporte, de poder jugarlo contra mi hermano y ojalá, algún día, podamos hacerlo juntos (en un mismo equipo)”.
Los crepusculares mostraron una cara distinta tras su sorpresiva caída de la noche del viernes 19, 98-92. “El mensaje del scouting fue muy claro. No dar tantos rebotes ofensivos y no perder tantos balones y eso fue lo que salimos a hacer. Vimos a un Heissler Guillent y un Nate Robinson más concentrados en llevar la pelota sin perder balones y así organizar al equipo de la mejor manera, así como también a mí cuando me tocó”.
Recordó que su rol es “escuchar las directrices de los técnicos y el scouting. Ellos hacen un excelente trabajo para que salgamos a jugar sabiendo lo que hará el contrario, aunque en este deporte puede suceder cualquier cosa”.
