En la capilla San Miguel Arcángel, en el Museo de Barquisimeto, se celebró una especial serenata para todas las madres en su día.
La bolerista, Nena Muñones recibió a los espectadores larenses que se acercaron a pasar una tarde diferente junto a sus familiares, ella expresó que las madres son las autoras de lograr lo imposible y afrontar cualquier tipo de obstáculo; y su amor sobrepasa cualquier tipo de enfermedad y barrera.
La presentación musical la inició la banda musical Canta Guaro quienes con el ritmo del tambor, el violín y la guitarra pusieron a bailar y aplaudir a todo el público barquisimetano. Esta agrupación es polifónica y se especializa en el golpe estilizado.
El músico Nani Linares realizó una presentación de tango. Interpretó algunos temas de Gardel Lepera que datan del siglo XX. La pieza El último de café de Stamponi no quedó por fuera y cerró su presentación con: Por una cabeza, tema interpretado en la película Perfume de mujer. Linares igualmente le tenía preparada a todas las madres un popurrí de boleros del recuerdo, es decir, un ramillete de poemas hechos canciones, con las piezas: Sorpresa, Bésame mucho, Nosotros y Quizás.
Edgar Mejía quien ha dedicada la mayor parte de su carrera al trabajo trovadoresco con su guitarra y la poesía, presentó un repertorio igualmente dedicado a las madres. Su música está identifica por ser romántica y poseer un mensaje positivo sobre el amor y la familia.
Hizo una presentación de Canto a Victoria de Pablo Milanes; Tocando al frente, tema principal de la novela Pantanal; al igual que una hermosa canción dedicada a su mamá que se llama Magdalena. “ Tiene como 10 hijos mi Magdalena y a todos nos cobija en su mirada bella. Me llenó de emoción al ver a Magdalena porque yo soy su continuación y ella mi vida entera”.
Mujica detalló que cada poeta tiene su inspiración propia y en su caso es su madre; por ese vínculo entre hijo y madre que se cimentó en medio de situaciones tanto buenas como malas, por ser primogénito.
La serenata a las madre finalizó con la participación de Herman Rojas, un espectador que semana tras semana participa en el concierto Encapillao, quien es amante de la poesía y decidió declamar un poema dedicado a las madres.
