Este viernes, en la audiencia de presentación ante el Tribunal 9no de Control, a cargo de la jueza Zuleima Angulo, se dictó medida privativa de libertad contra Samir Rojas, detenido el 10 de mayo en la avenida Libertador, cerca de La Botella, cuando llegó la GNB a reprimir una manifestación. Rojas se había trasladado hasta allí con la intención de buscar, por temor, a un hijo suyo que había salido a protestar.
Se le acusa de instigación, resistencia a la autoridad, detentación de sustancias incendiarias, daños a la propiedad privada y lesiones. Este último cargo, porque ese día fueron agredidos el coronel Arquímedes Alexander Padrino García y los sargento segundo Luis Javier Medina Arteaga y José Emmanuel Carrasco López, quienes pese a su condición de víctimas no estuvieron presentes, ayer, en la audiencia.
Cuando Rojas fue arrestado había en el mismo sitio unas 60 personas, pero solo lo detuvieron a él. En la boleta no se especifica quién agredió al coronel y al resto de los funcionarios ni el responsable de los daños materiales. Esto sumado a la no presentación de un informe médico legal que reseñe el tipo de lesiones son parte de las irregularidades del caso, explicó el abogado Pedro Troconis, coordinador en Lara del Foro Penal Venezolano.
Al no existir suficientes elementos de convicción, la defensa apelará la medida. Mientras se completa la fase de investigación, Rojas permanecerá detenido en el comando de la GNB, en Alí Primera.
Liberan otros 11
En el transcurso de este viernes, recobraron su libertad 11 ciudadanos detenidos en protestas desde los primeros días de abril. 10 de ellos, ocho adultos y dos menores de edad, fueron defendidos por los abogados del Foro Penal Venezolano. El otro es Walmore José Colmenárez, quien había sido aprehendido en La Mora, municipio Palavecino, el 2 de mayo. Su caso lo llevaron abogados privados.