Real Madrid capeó un temporal en el primer cuarto de hora y se clasificó el miércoles a la final de la Liga de Campeones a pesar de perder 2-1 ante Atlético de Madrid.
El conjunto dirigido por Zinedine Zidane superó la eliminatoria con marcador global de 4-2, gracias a su triunfo por 3-0 en el partido de ida la semana pasada en el estadio Santiago Bernabéu.
El Madrid buscará revalidar la corona que conquistó el año pasado, precisamente en una final ante el Atlético, cuando enfrente a la Juventus el 3 de junio en Cardiff. El club italiano despachó el martes al Mónaco en la otra semifinal.
Clasificado a su su tercera final en los cuatro últimos años, el Madrid intenta convertirse en el primer equipo que gana títulos consecutivos desde que nació el formato de Liga de Campeones en 1992. También va por su 12da corona de Europa, por mucho la máxima cifra del continente.
Atlético, obligado a protagonizar una remontada titánica en el último partido internacional antes de mudarse de su estadio Vicente Calderón, entusiasmó a su ferviente hinchada con un par de goles en un arranque frenético: Saúl Ñíguez a los 12, y Antoine Griezmann, de penal, cuatro minutos después. Asimilado el golpe de entrada, el Madrid se ordenó en el mediocampo y empezó a controlar las acciones a partir de la media hora.
Un gol de Isco a los 42 minutos, después de una magnífica jugada de Karim Benzema en la que superó a tres defensores pegado a la línea de fondo, sentenció al Atlético, que estaba obligado a marcar otros tres tantos porque el gol de visitante de Real Madrid valía por dos.
Los rojiblancos ahora han caído ante el Madrid en las cuatro últimas ediciones de la Champions, tras perder en las finales de 2014 y 2016, y en los cuartos de final de 2015.