Desde hace algunos meses personas en condición de calle hicieron del parque Río Cenizo, al este de la ciudad, su dormitorio. No obstante, el lugar no lo tratan como su hogar manteniéndolo cuidado y resguardando el área, por el contrario, los vecinos de Santa Elena y Fundalara (sectores entre los que confluye el patio recreacional) aseguran que han aumentado los casos de robos tanto adentro, como afuera de las instalaciones.
No menos de 10 personas hacen uso de los depósitos en los cuales los Scouts La Claret mantenían resguardados algunos objetos para realizar actividades con los pequeños de la comunidad y otras indumentarias. Esto ahora funciona como las “habitaciones”, en donde los cartones hacen de camas y los alrededores de sanitario. Los candados que resguardaban los pequeños almacenes fueron violentados y ahora cualquiera puede tener acceso.
“Ahí había unos estantes y los sacaron, las témperas las botaron. Rompieron la cerca perimetral y entran por un hueco”, denunció José Lugo, coordinador de la Asociación de Vecinos de Fundalara (Avefunda). Asimismo destacó que la cajeta eléctrica también fue desmantelada robando todos los breakers.
La maleza también les favorece, puesto que el alto de la misma crea una especie de “cortina” que evita que el vigilante de la residencia cercana pueda prevenir a los vecinos sobre la llegada de los indigentes. “Hemos hablado con la Empresa Municipal de Infraestructura y Conservación del Ambiente (EMICA) para que vengan a hacer mantenimiento, nos han respondido pero no han venido”, expuso el denunciante quien además agregó que anteriormente se contaba con una desmalezadora la cual fue hurtada.
Han sido múltiples los llamados de atención que se le han hecho organismos como la Policía del Estado Lara y la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) para solicitarles el patrullaje en la zona y lograr desalojar a los individuos del parque, debido a que estos siembran temor entre los habitantes. A pesar de que funcionarios con altos rangos forman parte de los afectados por habitar en las cercanías, hasta los momentos no se cuenta con un puesto de vigilancia en el lugar.
Las luminarias también fueron desmanteladas, por lo que la iluminación en el lugar es nula, lo que contribuye a que se generen constantes robos e incluso, se generen otros actos delictivos. “Yo he pasado en la noche y veo a gente dejando un paquete, al día siguiente viene otra persona y lo recoge”, informó otro vecino de la zona.
Hace aproximadamente cuatro años el coordinador de Avefunda era presidente del consejo comunal, en ese entonces se encargó de organizar a la comunidad y hacer importantes mejorías en las instalaciones del parque Río Cenizo, sin embargo, las diferentes propuestas se vinieron abajo porque no les otorgaron más recursos para llevar a cabo los trabajos. “Por ser ‘escuálidos’ como ellos dicen no quisieron que siguiéramos trabajando”.
Durante el recorrido, el equipo reporteril de EL IMPULSO constató la presencia de personas ajenas a la comunidad, quienes hacen vida en el parque a pesar de no ser un lugar idóneo para habitar. El coordinador de Avenfuda medió con algunos de ellos, quienes reconocieron que no deberían hacer uso del espacio y luego de unos minutos salieron de los depósitos con algunas pertenencias, sin embargo los vecinos temen que regresen, por lo que hicieron un llamado urgente a los organismos competentes para que mejoren las condiciones del parque, otorgándole seguridad y mantenimiento.