A propósito de atender la escasez de pan en la entidad, originada por la ausencia de su principal materia prima, Luis Castillo, coordinador del Consejo Soberano de Economía Productiva, anunció que dicha instancia labora junto a consejos comunales, Comités Locales de Abastecimiento y Producción (Clap), Luis Jonás Reyes, Nelson Torcate y propietarios de panaderías en la distribución de harina de trigo.
El suministro del ingrediente, inició en Iribarren la presente semana y se espera que el programa sea llevado a los demás municipio larenses a partir el 2 de mayo. Esto con el fin de llevar “pan popular a los larenses”.
Subrayó que según análisis por bandejas de pan y otros productos como lunchería y repostería, han dispuesto entregar a las panaderías pequeñas por semana el equivalente a tres sacos de harina de trigo y cinco a las grandes, a objeto de que haya oferta del producto desde las 8:00 de la mañana hasta el cierre de los locales.
Según estructura de costos, calculada a escala nacional por la Superintendencia de Precios Justos (Sundde), el producto deberá venderse a Bs. 100 pan francés, Bs. 250 pan canilla y Bs. 550 pan campesino.
-Tenemos que ser sinceros. Sabemos que hay voceros de Clap y consejos comunales que no hacen su trabajo y también por eso hay fallas en las panaderías… Si no nos acercamos al empresario y no se resuelven los problemas el afectado es el pueblo.
Se le consultó si contaban con el número de panaderías atendidas y dijo no tener la cifras. Sin embargo, detalló que para formar parte de la programación los panaderos deben ponerse en contacto con el Clap de la zona donde prestan servicio.
Manifestó sólo ser acompañantes de las partes, pero estar seguro de que el Estado brindará apoyo y distribución a toda aquella panadería inscrita en el sistema sea privada o comunitaria
Sobre el suministro de mantecas, margarina y azúcar para la elaboración de productos del ramo, expresó que el Gobierno Nacional también se ha ocupado de la distribución de los mismos.
Rechazo a las agresiones
Castillo aprovechó la oportunidad para rechazar las agresiones de las cuales han sido objeto personal de medios de comunicación en Lara, durante manifestaciones violentas.