En el caso del embargo de la ensambladora General Motors de Venezuela (GMV), no hay expropiación, confiscación u ocupación por parte del Ejecutivo, aseguró el ministro para la Seguridad Social y el Trabajo, Francisco Torrealba, quien afirmó que el presidente de la planta vendrá a Venezuela a defender los derechos de la empresa en las instancias que corresponde.
-El Estado venezolano no ha expropiado ni confiscado General Motors, el Estado venezolano desea la reactivación de la producción de General Motors en manos de sus legítimos dueños, esto se lo hemos dicho al actual del presidente actual de GM José Camillieri, el Estado venezolano no quiere expropiar ni confiscar, sino proteger los puestos de trabajo.
Señala que el interés del Ejecutivo es brindarle a las ensambladoras que operan en el país, todas las facilidades y estímulos para que reactiven su producción en un 100%, de manera que no solo pueden atender la demanda interna, sino que además puedan exportar y convertirse en una nueva fuente de generación de divisas.
Sobre lo que ocurre en la planta, dijo que se trata de un juicio entre particulares, porque unos concesionarios en Maracaibo pagaron unos vehículos que nunca recibieron, esos concesionarios entablaron un juicio y a GM le corresponde asumir la defensa.
-Este es un problema entre particulares, pero que ha intentando venderse frente al mundo, como que el Gobierno está tratando de expropiar la planta, y le hemos dicho al presidente actual que venga-.
Recalcó que es imprescindible que la planta retome sus actividades debido a que los asuntos legales internos de la planta no son responsabilidad del Estado
-En el marco del convenio de economía productiva a las ensambladoras se le ha dado un tratamiento especial, el Estado reconoce a este sector y se les ha dado un conjunto de temas que tienen que ver con financiamiento y otras formas de apoyo para que estas plantas reactiven y lleven a su máxima capacidad los niveles de producción-, aseguró
Recordó que junto con el Ministro de Economía y Finanzas, Ramón Lobo y Miguel Pérez Abad, presidente del Banco Bicentenario, acudió a la planta a realizar una asamblea con los trabajadores.
-El objetivo del Presidente es que se restituyan los puestos de trabajo y vuelvan a la normalidad las operaciones. No hay confiscación, expropiación ni ocupación-, aseguró Torrealba.